Una tendencia silenciosa pero significativa está transformando las cocinas argentinas y del mundo: el tradicional rollo de cocina, ese elemento omnipresente en los hogares, está quedando atrás.
En su lugar, cada vez más personas optan por opciones económicas y reutilizables, como los paños de microfibra y las toallas de cocina lavables, repasadores, impulsados por la creciente conciencia ambiental y la economía circular. Esta revolución sostenible promete cambiar hábitos arraigados y reducir el impacto ecológico.
Por qué el rollo de cocina pierde relevancia
Durante décadas, el rollo de cocina ha sido un aliado esencial para limpiar derrames, secar platos y resolver emergencias domésticas.
Sin embargo, su uso masivo ha generado críticas por su impacto ambiental: en Argentina, se estima que cada familia desecha alrededor de entre 4 y 10 rollos al mes, contribuyendo a millones de toneladas de desechos no reciclables anuales. Además, el costo acumulado ha llevado a muchos a buscar alternativas más económicas.
La pandemia de 2020 marcó un punto de inflexión, cuando la escasez de productos desechables obligó a las familias a improvisar con opciones reutilizables. Ahora, en 2025, esta práctica se ha consolidado como una tendencia, respaldada por la educación ambiental y la disponibilidad de productos sostenibles a precios accesibles.
La nueva estrella: paños reutilizables y su ventaja
Los paños de microfibra y los repasadores, o toallas de cocina lavables emergen como la nueva opción preferida. Las servilletas de tela son también una gran opción.
Estos productos, disponibles en tiendas como Mercado Libre o cadenas como Easy, cuestan entre $ 1.500 y $ 3.000 por un set de cinco, con una durabilidad de hasta dos años con uso cuidadoso. Esto representa un ahorro significativo frente al gasto continuo en rollos de cocina. Además, son altamente absorbentes, versátiles y fáciles de lavar, lo que los hace ideales para tareas diarias.
La sostenibilidad es otro factor clave. Mientras un rollo de cocina genera residuos inmediatos, un paño reutilizable reduce la huella de carbono al evitar el uso de papel proveniente de la deforestación.
Usuarios en redes sociales, como en el hashtag #VidaSostenible2025, destacan que un solo paño puede reemplazar hasta 100 rollos, lo que equivale a menos basura y un impacto positivo en el medio ambiente.
