El budín de chocolate es un clásico imbatible a la hora de la merienda, pero muchas veces queda relegado por su alto contenido de azúcar y lácteos. Sin embargo, hay una excelente noticia para los amantes de este postre: ¡existe una versión saludable que no resigna ni sabor ni esa textura húmeda que tanto nos gusta! Este budín, libre de azúcar y lácteos, es ideal para quienes buscan cuidar su alimentación sin privarse de un capricho dulce.
Los budines tradicionales suelen estar cargados de manteca y azúcar, pero esta alternativa nutritiva te permite disfrutar del chocolate sin culpas. Reemplazando ingredientes altos en calorías por opciones más saludables, lo que se traduce en un postre que aporta energía y fibra, pero manteniendo ese sabor irresistible del chocolate.

Tomá nota para hacer este delicioso budín saludable
A continuación, te compartimos el paso a paso para preparar este delicioso budín de chocolate húmedo y saludable, ideal para acompañar unos buenos mates o un café:
1. Para empezar, precalentá el horno a 180 °C y, mientras toma temperatura, engrasá un molde mediano con un poco de aceite de coco o vegetal.
2. En un recipiente, mezclá bien todos los ingredientes secos: una taza de harina integral o de avena, media taza de cacao puro, una cucharadita de polvo de hornear y una pizca de sal.

3. En otro bol aparte, prepará los ingredientes húmedos: una taza de bebida vegetal (puede ser de almendra, avena o soja), un cuarto de taza de aceite de coco derretido y media taza de endulzante natural a tu gusto, como dátiles procesados o stevia.
4. Ahora, uní ambas mezclas: vertí los ingredientes húmedos sobre los secos y revolvé con una espátula o batidor hasta lograr una masa homogénea y sin grumos.
5. Si querés darle un toque extra, podés agregar dos cucharadas de nueces picadas o chips de chocolate sin azúcar a la preparación.
6. Volcá la mezcla en el molde que ya tenías preparado y horneá por unos 35 a 40 minutos. Para asegurarte de que esté listo, introducí un palillo; si sale limpio, ¡está perfecto!
7. Finalmente, dejalo enfriar completamente antes de desmoldar y servir. Así podrás disfrutar de un budín húmedo, esponjoso y lleno de sabor.