La calabaza o zapallo es uno de los vegetales más versátiles y económicos de la cocina argentina. Ahora, gracias a la creatividad de usuarios como @Kulinaria.recetas, se viralizó una idea que propone utilizar el 100% del vegetal:
- La pulpa se transforma en un postre dulce, esponjoso y aireado.
- La cáscara y las semillas, en un snack crocante y lleno de sabor.
El atractivo de estas preparaciones no solo está en su sabor, sino en que no requieren horno, ya que se cocinan en la freidora de aire (air fryer), un electrodoméstico que gana protagonismo en hogares y redes sociales.
Crackers saladas de “cero desperdicio”
El costado más innovador es el de las crackers de cáscara y semillas, partes que habitualmente se descartan. El paso a paso es sencillo:
- Lavar bien el zapallo y retirar la piel con un pelapapas.
- Mezclar las cáscaras y semillas con aceite de oliva y condimentos (sal, pimienta, orégano, pimentón o ajo en polvo).
- Cocinar en la freidora a 200°C durante 20 minutos.
- Colocar sobre una base de queso mozzarella y queso rallado y volver a la freidora hasta dorar.
El resultado son unas galletas extremadamente crocantes y sabrosas, con textura de snack casero.
Budín húmedo y aireado con sabor a cacao
Mientras tanto, la pulpa de media calabaza cocida se convierte en un budín de chocolate. La preparación es así:
- Procesar la pulpa con 60 g de chocolate amargo derretido en 50 ml de leche caliente, sumar dos cucharadas de cacao y las yemas de cuatro huevos.
- Aparte, batir las claras con azúcar o miel hasta formar un merengue firme.
- Integrar un tercio del merengue a la mezcla y luego el resto con movimientos envolventes.
- Cocinar en la freidora a 150°C durante 30 a 35 minutos.
El resultado es un budín esponjoso, húmedo y de sabor profundo, que quienes lo probaron comparan con una “nube de cacao”.