Con reservas netas que según estimaciones privadas están en negativo por unos U$S 10 mil millones, el Banco Central (BCRA) dispuso suspender la venta de dólares para operaciones inmobiliarias con crédito, con lo cual una de las principales herramientas dispuestas a nivel provincial para la financiación de viviendas, verificó un duro golpe.
Se trata de un nuevo cepo cambiario, materializado a través de la Comunicación A7895, que comenzó a regir este viernes ya que suspendió “el acceso al mercado de cambios para la compra de moneda extranjera por parte de personas humanas residentes para la aplicación simultánea a la compra de inmuebles en el país a partir de préstamos hipotecarios otorgados por entidades financieras locales”, indica la disposición.
La medida adoptada por el directorio que encabeza Miguel Pesce marca hasta qué punto están constreñidas las reservas del BCRA y también afecta el desarrollo de líneas de crédito como la materializada por Bancor, con notable suceso, a través de préstamos UVA a tasa cero con financiación a 20 años.
Hasta el jueves, la entidad provincial había entregado 3.610 créditos desde su puesta en marcha, constituyéndose en una importante herramienta para el mercado inmobiliario, tanto el institucionalizado a través de desarrollistas o inmobiliarias, como el de la compra-venta entre particulares.
Fuentes de Bancor explicaron que en realidad esta línea UVA tasa cero no quedará desactivada, sino que el caerse la posibilidad de dolarizar el monto del crédito, el titular del préstamo se queda sin la alternativa para entregárselos al vendedor. A partir de ahora, todo es en pesos.
Los números
“Estuvimos firmando créditos hasta el jueves, los últimos 30 o 40 quedaron sin suscribirse porque apareció esta novedad del BCRA, por suerte la gente comprendió que no era un problema nuestro”, dijeron desde la entidad provincial.
El crédito más pedido oscilaba entre las 65 mil y las 69 mil UVAs, lo cual permitiría materializar un crédito de unos $26 millones a $30 millones. El titular “se daba vuelta y compraba entre 70 mil y 75 mil dólares (el tope autorizado por el BCRA eran U$S 100 mil), con lo cual podía acceder a un departamento o una vivienda, eso concluyó”, explicó una fuente.
Con esa operatoria, era posible acceder al dólar oficial minorista ($372,50), no se aplicaban el impuesto Pais (30%), el impuesto a cuenta de Ganancias (100%) y a cuenta de Bienes Personales (25%).
En la entidad financiera admiten que, con la conocida falta de dólares que hay en las reservas, esperaban mucho antes una decisión de esta naturaleza.
En distintas oportunidades, el BCRA preguntó a los funcionarios de Bancor por qué razón esa línea tenía una alta demanda. La duda de fondo es que se tratara en realidad de una forma de sacar dólares oficiales del sistema.
Inclusive pidieron que se demostrara que las ventas de los inmuebles estaba efectivamente realizada, cosa a la que accedió la entidad provincial.
Mercado repartido
Una importante cantidad de los 3.610 créditos otorgados hasta el jueves se gestionó por la oferta formal canalizada por desarrollistas e inmobiliarias, pero el número más significativo se dio entre particulares con departamentos o viviendas calificadas a través de la plataforma Appto.
Entre el 15% y el 20% de todas las ventas de inmuebles realizadas en Córdoba eran canalizas a través de esta línea. “No la vamos a desactivar, pero va a quedar ahí dormida, sin demanda”, reconocieron en Bancor.
Mar de lágrimas
Martín Teicher, presidente del grupo desarrollista Elyon, lamentó la finalización de la operatoria con dólares oficiales, aunque el crédito continúe disponible en pesos.
“Toda la gente que fue a firmar, terminó en un mar de lágrimas porque estaban logrando acceder a su vivienda y se le escapó de la mano ya que dejó de ser un crédito atractivo como era”, sintetizó.
Destacó que mientras estuvo activo “fue un programa extraordinario, a través de un banco que siempre estuvo apoyando a las Pymes, inclusive en lo más duro de la pandemia”.
Recalcó que la mayoría de los tomadores del préstamo eran miembros “de las clases sociales sin vivienda, por lo cual le permitió cumplir el sueño a muchas familias”.
Teicher apuntó que la situación del mercado inmobiliario pasó a ser “dramática”. “Hoy tampoco se están renovando alquileres”, puntualizó. Y volvió a defender el esquema de créditos con UVA: “los contratos de alquileres subieron mucho más que las cuotas con este tipo de préstamo”, insistió.
