El segundo desembarco en el Senado de la fueguina Cristina López estuvo marcado por el escándalo, forcejeos y denuncias penales.
La senadora K, que renovó su mandato este año, intentó ocupar un despacho en particular llevando a un cerrajero para habilitar el ingreso, el cual había sido fajado por la Presidencia del Senado.
El personal de Seguridad de la Cámara Alta impidió que López irrumpiera en la oficina que antes ocupaba el senador saliente Sergio Leavy.
La Vicepresidenta Victoria Villarruel había emitido una resolución en septiembre estipulando que los senadores con mandato cumplido debían restituir los despachos.
El video del escándalo
El incidente quedó registrado en videos donde se escuchan gritos y amenazas de denuncias.
López, que buscaba ingresar para recuperar objetos personales como su computadora, confrontó al personal de Seguridad, vociferando: “Denuncia penal para todos”.
Luego de la viralización de las imágenes, el equipo de López confirmó que se presentó una denuncia penal por lesiones, amenazas y agresiones sexuales contra el personal de Seguridad del Senado.
La denuncia detalla que López sintió “manoseos en la zona de los glúteos, en su zona pélvica delantera, en la zona de las entre piernas”, además de recibir empujones y un golpe en la pierna.
La lesión fue constatada por el médico del Senado, Gustavo Apreda, quien describió un “hematoma a nivel de zona superior del tobillo derecho de 5 x 3 cm”.
Desde el equipo de la senadora se afirmó que fue “agredida por personal que responde a la vicepresidenta, Victoria Villarruel” durante el forcejeo.
López vinculó la acción de seguridad con su postura política, señalando que permitir el castigo a un senador por su posición es “un mensaje muy peligroso para la democracia”.
Voceros de Villarruel evitaron comentar si la acción de López violó la resolución existente o si podría acarrear una sanción.
