La Municipalidad de Córdoba pondrá en marcha en las próximas semanas un plan piloto de refuerzo de la prevención y la convivencia ciudadana en el parque Sarmiento, el espacio verde más grande y masivo de la Capital.
Será la primera experiencia del municipio capitalino en materia de seguridad: el esquema de patrullaje prevé un equipo mixto, conformado por el personal de BioCórdoba que tiene a su cargo el control del principal espacio verde de la ciudad, por agentes municipales y por efectivos de la Policía de Córdoba.
Hasta ahora, la administración de Martín Llaryora había mantenido la misma decisión de todos sus antecesores en el municipio: no intervenir de modo directo en esquemas vinculados a la prevención del delito, que siempre estuvieron exclusivamente en manos de la Policía de Córdoba.
El programa Corredores Seguros, iniciado durante la administración de Ramón Mestre y profundizado desde 2020; el refuerzo de la iluminación de espacios verdes; la instalación de domos en las calles y de cámaras de seguridad en los colectivos, y las obras provinciales de urbanización de asentamientos son acciones vinculadas a la seguridad desde la infraestructura, pero nunca hubo programas municipales de prevención del delito.
Con todas las encuestas señalando al unísono que la inseguridad es el mayor problema urbano y con la oposición política haciendo blanco casi exclusivamente en ese eje de la gestión provincial, Hacemos por Córdoba se apresta a lanzar en breve una experiencia piloto dentro de los límites del parque Sarmiento, una zona muy compleja en materia de seguridad. Robos, picadas de autos y motos, accionar irregular de “naranjitas” y vandalismo son fenómenos cotidianos en el espacio verde más popular de la ciudad.
Larga planificación para Córdoba
Según se informó desde el municipio, desde el año pasado, la Secretaría de Gobierno que encabeza Miguel Siciliano recorrió y analizó numerosas experiencias de seguridad ciudadana en la ciudad de Buenos Aires, en Tigre y en San Miguel, entre otras. También, las de varias ciudades del Gran Córdoba que tienen esquemas de patrullaje municipal preventivo.
Desde entonces, hubo un trabajo conjunto con el Ministerio de Seguridad de la Provincia y la Jefatura de Policía. Aunque en el Palacio 6 de Julio todos evitan el término “seguridad”, el esquema preventivo apunta en ese sentido.
En el equipo de Llaryora insisten en no generar expectativas de masividad que por el momento el programa no tiene. “Son intervenciones que requieren ajustes, tecnología, vehículos y personal entrenado”, recalcaron. En el parque Sarmiento, ya están instalados todos los domos, que en breve tendrán personal observando las imágenes en tiempo real en conexión con los móviles municipales que reforzarán el patrullaje.
“El esquema no se extenderá hasta que no esté probado y muy aceitado”, reiteran desde la Secretaría de Gobierno. También aclaran que el municipio priorizará en todo momento el cumplimiento del Código de Convivencia Urbana y que es la Policía y la Justicia quienes deben ocuparse del Código Penal. El objetivo municipal era poner a prueba el nuevo patrullaje antes de hacerlo público, pero la iniciativa se filtró.
Gustavo Folli, exjefe de Policía, que se desempeña como director general de Seguridad, Defensa Civil, Capacitación y Emergencia Urbana del municipio, es uno de los funcionarios con rol clave en el diseño del nuevo esquema. También participan directamente en la planificación el propio Llaryora, Siciliano y las autoridades provinciales de mayor responsabilidad en materia de seguridad: el ministro de Gobierno y Seguridad, Julián López, y el secretario de Seguridad, Claudio Stampalija.
El área de prevención ciudadana contará con un protocolo de acción, móviles y personal específico que trabajará apoyado en el sistema de videovigilancia y, de manera estrecha, con la Policía.
En el protocolo que está en estudio en el Palacio 6 de Julio, habrá un controlador y un policía en un vehículo oficial y, ante el advenimiento de un delito, podrá solicitar el refuerzo de un patrullero. En el municipio, recalcan que el parque Sarmiento es una de las áreas.
La principal crítica de Juntos por el Cambio al Gobierno
Todos los políticos leen las encuestas. La inseguridad es la principal demanda ciudadana en la provincia de Córdoba y hasta ahora también es el eje de las críticas de Juntos por el Cambio a las gestiones del gobernador Juan Schiaretti y de su candidato para la sucesión, el intendente Martín Llaryora.
El senador y precandidato a gobernador Luis Juez le dijo a La Voz que la política de seguridad será una de las principales banderas que llevará adelante su candidatura. “Es el principal reclamo de la gente tras 24 años de fracaso rotundo del Gobierno provincial”, indicó. Recalcó que seguridad no es únicamente la compra de patrulleros, sino la inversión en el recurso humano.
El diputado y también precandidato a gobernador Rodrigo de Loredo realiza referencias continuas al tema de la inseguridad en talleres que comparte con dirigentes radicales y con vecinos de la ciudad de Córdoba. “El Gobierno es muy exitoso en la redistribución regional de la inseguridad”, consideró días atrás.
En una visita al barrio Don Bosco, sostuvo que “se manifiestan las consecuencias de una gestión displicente al punto de que la sábana le queda corta para atender las situaciones de coyuntura. Antes se calentaba el verano en los barrios de las ciudades más grandes, ahora se ha coparticipado a cada una de las localidades serranas. Todo es consecuencia de la falta de gestión”, sostuvo.
Los precandidatos a intendente de Córdoba de Juntos por el Cambio también apuntan preferentemente a la inseguridad a la hora de criticar la gestión municipal de Llaryora: es el eje en los recorridos barriales de Juan Negri y también el tema casi excluyente de Sebastián García Díaz, precandidato del PRO.
En su discurso en la apertura de las sesiones legislativas, el gobernador anunció la compra de mil autos para la Policía -700 de los cuales ya fueron adquiridos-, de 350 motos, de 200 cámaras individuales para los equipos de intervención rápida y de 4.500 chalecos antibalas. También esos anuncios fueron cuestionados por la oposición por insuficientes.
