La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner habló este martes, vía Youtube, sobre la causa Vialidad (en la que está siendo juzgada) y sobre eso, cargó contra los fiscales que la acusan de ser jefa de una asociación ilícita para defraudar al Estado.
Con ese objetivo, afirmó que los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola hicieron mal su trabajo al descartar una serie de pruebas que implicarían a Nicolás Caputo, el empresario a quien Mauricio Macri considera un “hermano” de la vida.
La vicepresidenta también mencionó a otros empresarios, como Eduardo Gutiérrez, del grupo Farallón, y Juan Chediack, de la Cámara Argentina de la Construcción.
En su alocución, Cristina hizo referencia a los mensajes telefónicos que Luciani mostró en su alegato. En esa prueba, según la acusación del fiscal, se puede probar el vínculo entre el exsecretario de Obras Públicas del kirchnerismo, José López, con gente relacionada con el empresario Lázaro Báez.
Pero Cristina remarcó que en el mismo teléfono de López, de donde se sacaron los mensajes, había otros que los fiscales “olvidaron”.
Sobre eso, Cristina advirtió que esas conversaciones, según los criterios de la fiscalía, “serían un escándalo monumental, pero sorpresivamente no les llamó la atención”.
Acto seguido, la vicepresidenta mostró comunicaciones entre Caputo y López que, afirmó, demuestran la “familiaridad” que existía entre ambos.
“Asociación ilícita”
Al poner el foco en que los fiscales Mola y Luciani, Cristina enfatizó que “no vieron que había una asociación ilícita” entre López y empresarios relacionados con el macrismo como Caputo y Gutiérrez.
Caputo es del PRO y era el principal referente de la constructora Caputo hasta que la vendió, en 2018. También participa en la producción de electrodomésticos y de energía a través de empresas como Mirgor SA y Sadesa.
Gutiérrez, por su parte, es titular de la constructora Farallón, que construyó obra pública durante las presidencias de Cristina Kirchner. El juez federal Daniel Rafecas lo procesó junto a otros empresarios como supuestos testaferros de López.
Este martes, en otro pasaje de su discurso, la vicepresidenta se preguntó: “¿No les llamó la atención la familiaridad de López con Caputo?”.
”Con la frecuencia y la cotidianidad que tenían entre ellos me llama la atención que al fiscal Luciani y Mola no le llame la atención esto. Notable”, ironizó.
Y continuó: “No lo habrá investigado. No lo habrá llamado porque comparte vestuario cuando va a jugar al fútbol en la quinta los Abrojos”, propiedad de Macri en el partido de Malvinas Argentinas.
Luego, describió toda la operatoria llevada adelante en la obra del soterramiento del tres Sarmiento, en Buenos Aires, en el que participó Caputo y también López.
Para Cristina, entonces, el dinero de los bolsos de López provenían de esa relación.
“Fiscales mentirosos”
Con el objetivo de desacreditar el trabajo de Luciani y Mola, Cristina aseveró que “se va a demostrar que además de mentirosos, los fiscales no trabajaron. No leyeron las pruebas que consta de 9 mil fojas”.
”Cuando el fiscal Diego Luciani dice: ‘Donde uno aprieta sale pus’, tiene razón; sale la pus de ustedes, los macristas”, dijo la expresidenta.
Al ejercer su “derecho a la defensa” por su canal de YouTube, luego de que el Tribunal Oral Federal 2 le negara la posibilidad de ampliar su declaración indagatoria, la exmandataria definió los alegatos de Luciani y Mola como un “guión bastante malo y falso”.
