“Los políticos deben entender que la maquinita de la felicidad no existe”, aseguró el último exministro de Economía de la gestión de Cambiemos y flamante jefe de los equipos económicos que asesoran al precandidato de Juntos por el Cambio, Horacio Rodríguez Larreta.
El economista apuntó así a la emisión descontrolada de pesos, un concepto que reiteró durante su exposición junto con el extitular del Banco Central, Guido Sandleris, en el evento de cierre del año organizado por la Bolsa de Comercio de Córdoba. Sandleris es asesor estratégico del Instituto de Investigaciones Económicas de la entidad.
“La macro manda”, reforzó Lacunza. “Se pueden hacer reformas micro, pero si el dólar es un barrilete se lleva puesto todo”, marcó al hablar de la desmesura que significa que existan tantos valores de la divisa norteamericana.
Sobre ese punto, Sandleris afirmó que al Gobierno le será “muy difícil” que el campo vuelva a vender la soja sin el aditivo que representa la cotización especial que repuso el Gobierno desde el último lunes. “Lo dije hace unos meses y no me equivoqué: nadie venderá la cosecha sin el precio diferenciado. Es un parche, la solución de fondo pasa por achicar el agujero fiscal”, planteó.
Ante empresarios, funcionarios, políticos y representantes de la Justicia provincial y Federal, Lacunza dijo que de esta crisis “no se sale con magia, sino con un plan con consistencia”. En esa línea planteó que se debe “combinar ambición fiscal con prudencia monetaria”. “No será el primer día, no se puede saltar a un abismo sin red”, aclaró.
En consonancia con lo que había planteado en la apertura del evento Manuel Tagle, titular de la Bolsa, ambos economistas resaltaron la necesidad de entender que “con lo propio no alcanza”. Y pidieron una integración inteligente al mundo y dejar de vivir en déficit. “No se puede gastar todo el tiempo por encima de las posibilidades”, coincidieron.
Para Lacunza, el mediano plazo podría ser promisorio si se hacen los ajustes necesarios. En ese sentido le dijo a los empresarios que sigan apostando e invirtiendo. “Seguirá nublado y habrá niebla, pero ustedes saben conducir en esas condiciones”, les planteó a los hombres de negocios. Dijo, de todos modos, que no avizora el impacto de un tsunami. Además, planteó que 2024 será un año en donde las cosas estarán mejor que en 2023.
