El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, calificó como “complicada” la última sesión en la Cámara de Diputados, en la que el oficialismo sufrió una serie de reveses políticos. “Perdimos todas”, dijo en Radio Mitre Buenos Aires. Y atribuyó los resultados a una estrategia de la oposición, en el marco de una etapa preelectoral.
Durante la jornada parlamentaria, se aprobó el aumento del financiamiento universitario, la declaración de emergencia en pediatría y la conformación de comisiones para debatir proyectos que refuerzan el envío de fondos a las provincias.
Además, la mayoría opositora rechazó cinco decretos delegados firmados por el presidente Javier Milei.
Francos cuestionó duramente al kirchnerismo por su rol articulador. “Se aprovecharon de la situación electoral para conseguir el apoyo del radicalismo, la Coalición Cívica y algunas fuerzas provinciales. Hicieron un poco de demagogia”, evaluó.
El jefe de Gabinete defendió el rumbo fiscal del Gobierno y lo contrastó con las iniciativas votadas por la oposición. Según sus datos, la deuda pública asciende a 500 mil millones de dólares, de los cuales atribuyó 303 mil millones a gestiones kirchneristas.
“Nosotros bajamos 34 mil millones desde que asumimos. Los recursos se obtienen bajando gastos, y eso es lo que venimos haciendo”, sostuvo.
Facultades
También defendió el uso de las facultades delegadas mediante decretos: “Todos los gobiernos del kirchnerismo gobernaron con facultades delegadas. Este gobierno las pidió por un año, hizo todo lo que tenía que hacer y no pidió prorrogarlas”.
Según explicó, los intentos por revertir desregulaciones y fusiones de organismos generarán nuevos gastos y pondrán en riesgo el superávit.
Francos adelantó que el Ejecutivo utilizará el veto si el Senado avanza con leyes que impliquen aumento del gasto: “Todo lo que podamos vetar, lo vetaremos”. Y remarcó que el Congreso aún debe tratar temas clave como el impuesto a los combustibles o los Aportes del Tesoro Nacional.
Consultado por las protestas convocadas por San Cayetano, el ministro ligó la informalidad laboral con el marco legal vigente. “Tenemos 20 millones de ocupados, pero solo 12,8 millones registrados. Eso también es producto de las leyes que queremos reformar”, argumentó.
Y concluyó: “Me parece bien que pidan trabajo, pero tienen que ir al Congreso a exigir que cambien las leyes”.