El exministro de Economía, Domingo Cavallo, evaluó las primeras medidas económicas del gobierno de Javier Milei y se mostró optimista en cuanto a la evolución de la inflación que podría caer a menos de un dígito en abril y seguir así por el resto del año.
En un trabajo que tituló “El gobierno podrá lanzar un plan de estabilidad cuando haya logrado eliminar todo vestigio de cepo cambiario”, Cavallo explicó que en esta etapa de la gestión Milei busca estabilizar las variables para luego avanzar hacia un plan económico.
En una economía con un alto grado de dolarización de hecho, “un plan de estabilización sólo puede implementarse cuando se ha logrado eliminar todo vestigio de restricciones al movimiento de capitales”, de modo tal que el mercado cambiario funcione “como un mercado verdaderamente único y libre”.
“Hasta que se den las condiciones para lanzar el plan de estabilización, es muy importante que se logre estabilizar el tipo de cambio real a un nivel compatible con el comercio exterior sin restricciones cuantitativas, sin vestigios de sesgo anti exportador y con un nivel de reservas externas suficientes como para respaldar los pasivos monetarios del Banco Central”, explicó en un artículo publicado en su blog personal www.cavallo.com.ar.
Resumió que las medidas anunciadas hasta el momento apuntan “a facilitar el realineamiento de precios relativos y la eliminación del déficit fiscal, pero se mantienen todas las restricciones al movimiento de capitales”. Es decir, “todas las variedades de cepos cambiarios que se fueron acumulando desde fines de 2019″.
Considerado el “padre” de la Convertibilidad que mantuvo por una década la inflación en niveles bajos, Cavallo se permitió lanzar varios consejos al actual ministro del área, Luis Caputo. “El gobierno no debe entusiasmarse con la reducción de la brecha entre el tipo de cambio oficial y el contado con liquidación (CCL), porque el CCL está muy lejos de ser un mercado libre de cambios”, resaltó.
Para avanzar hacia el mercado único y libre de cambios (Mulc) “es muy importante que, cuanto antes, el gobierno elimine los varios cepos que impiden que exista un mercado cambiario libre para todas las transacciones que no tengan que ver con el comercio de bienes”.
En cuanto a la inflación, Cavallo consideró posible disminuirla desde el nivel alto que alcanzó en diciembre y que estimó en el 25%. “Pero ello ocurrirá sólo si se va cerrando la brecha entre el tipo de cambio libre y el tipo de cambio comercial”.
Señaló en ese sentido que gran parte del aumento de la tasa de inflación en diciembre “se relaciona no tanto con el efecto directo de la devaluación sobre los precios de los bienes que estaban alineados al tipo de cambio oficial sino con la señal que el ajuste cambiario envió a todos los oferentes de bienes y servicios que habían estado reprimidos por controles de precios y decidieron evadirse de esos controles”, explicó.
Un ejercicio de simulación permite estimar que la tasa mensual de inflación pasará del 25% de diciembre, al 26 % en enero, el 21% en febrero y el 19% en marzo, a pesar de que la base monetaria se mantiene constante en 9 mil millones de pesos y los pasivos monetarios del Banco Central crecen sólo 6% mensual debido al pago de intereses por los pases, describió Cavallo.
Realineamiento de precios
Durante esos meses, la tasa de inflación no se explicará sólo por la expansión monetaria sino, fundamentalmente, “por el realineamiento de precios relativos que motorizaron las medidas económicas del 12 de diciembre y que pueden medirse a través de la reducción del tipo de cambio real de 1,60 a 1.
Un supuesto razonable, consideró Cavallo, “es que en diciembre ya se produce un realineamiento de precios relativos por un 16%, en enero por un 20%, en febrero por un 15% para agotarse en marzo con un remanente de 9%.
Si bien la tasa de inflación resulta de la suma del realineamiento de los precios relativos más la expansión de los pasivos del Banco Central, a partir de abril la inflación se explicará “totalmente” por la expansión de aquellos pasivos.
Los meses claves
“Se estima en 8% mensual durante los meses de abril a junio y en el 7% mensual desde julio a diciembre”, apuntó el exministro.
En esa línea, apuntó que la posibilidad de lanzar un plan de estabilización semejante (dolarización, convertibilidad o “inflation targeting” a la peruana) se dará a recién principios de 2025, siempre que se haya conseguido la unificación cambiaria.
“Por supuesto que si estas dos condiciones se consiguieran antes, el lanzamiento del plan de estabilización podría anticiparse. Pero no me animo a afirmar que ello sea altamente probable”, dijo.
Lanzado el plan de estabilización, “la tasa de inflación mensual puede bajar de inmediato al 20% anual para desembocar al cabo de los siguientes 24 meses en el 5% anual”, evaluó Cavallo quien agregó: “Se cumpliría plenamente con el compromiso asumido por el presidente Milei durante su campaña electoral”.
