Tras la decisión del gobernador de Santa Fe de echar al ministro de Seguridad provincial ante la creciente ola de violencia narco, hubo cruces entre Omar Perotti y el titular nacional de la cartera de Seguridad, Aníbal Fernández.
Omar Perotti, el gobernador de Santa Fe, echó el miércoles al ministro Rubén Rimoldi, quien llevaba menos de un año en el cargo. En la misma línea, desplazaron al jefe de la Policía provincia, Miguel Ángel Oliva. El puesto será ocupado por Martín García, quien hasta ahora se desempeñaba como subjefe.
Además, definieron que el puesto de ministro será ocupado por Claudio Brilloni, excomandante de Gendarmería y quien, hasta hoy, fue secretario de Seguridad Pública.
La salida de Rimoldi se da en un contexto de fuertes críticas y violencia en Rosario, donde el último episodio sucedió en un centro de salud municipal. Allí hubo una balacera, pero la policía no intervino y quedó la zona desprotegida.
Frente a este hecho, el intendente de la ciudad santafesina, Pablo Javkin, apuntó públicamente contra el gobierno provincial: “Que Rimoldi se venga a vivir acá”. Ante esto, el ahora exministro de seguridad explicó que tiene su domicilio en Rosario.
La ola de crímenes e inseguridad no se detiene y los cruces entre dirigentes tampoco. En las últimas horas el nuevo ministro de Seguridad provincial y el intendente de Rosario pidieron mejorar la logística de las fuerzas federales y sumar más patrulleros.
El gobierno de Santa Fe le pidió a Nación mejorar la logística de las fuerzas federales y sumar mayor cantidad de patrulleros para enfrentar el crimen organizado.
Aníbal Fernández le apuntó a Omar Perotti
El pedido llegó a oídos del ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, quien negó que desde el Gobierno no se preste ayuda a la provincia.
El funcionario nacional aseguró que hay unos 3.500 efectivos trabajando en los puntos más críticos de la provincia, con financiamiento de Nación y sin recursos provinciales. “No tener conocimiento de lo que sucede es delicado. Hace 20 años que tienen complicaciones de estas características”, apuntó Fernández.
“Nosotros presentamos cuáles son las estadísticas y están publicadas en Twitter. Vayan y véanlas. En un año tuvimos más de 2.077 detenidos financiados por las fuerzas federales, con lo cual nuestro trabajo es muy profundo. No es el trabajo del policía, que lo tiene que hacer la provincia”, defendió la gestión de Nación en diálogo con la prensa.
Al respecto, el ministro nacional argumentó: “En función de lo que los ministerios públicos tengan que hacer nosotros trabajamos. Hay casi 3.500 personas dedicadas específicamente y lo estamos financiando desde el Estado nacional. No le hemos pedido un centavo a la provincia”.
“Estamos trabajando con lo que nos piden, a eso fuimos. Pusimos un nuevo escuadrón donde tenemos 2000 efectivos más los movimientos que tenemos de todos lados, que no son públicos porque no deben serlo. Seguiremos mirando cuál es la tarea y qué es lo que piensa disponer el nuevo ministro”, puntualizó.
Qué dijo el nuevo ministro de Seguridad de Santa Fe
En sus primeras declaraciones públicas tras asumir al frente de la cartera de Seguridad provincial, Brilloni reclamó: “Creo que a las fuerzas federales, para revertir estos números negativos, lo que les está faltando son los recursos logísticos, principalmente los medios de movilidad. Los recursos humanos realmente han demostrado compromiso, mucho trabajo, mucho despliegue”.
En las últimas horas fue baleado un centro de salud municipal de Rosario y el intendente local, Pablo Javkin, le reclamó al ministro que se radique en la ciudad, a la vez que pidió la incorporación de 5.000 policías.
Con 24 asesinatos en enero y 7 en lo que va de febrero, la principal ciudad de la provincia se conmocionó por el crimen de Lorenzo Altamirano, ocurrido la semana pasada.
Brilloni reconoció que “hay un nivel de violencia instalado en la provincia, sobre todo en la ciudad de rosario”, pero buscó llevar tranquilidad a los santafesinos: “Tenemos claramente definidos cuáles son los puntos críticos que hay en la provincia en genera y en Rosario en particular”.
“La salida no solamente es la policía sino trabajar con todos los espacios que tienen que ver con el funcionamiento del Estado provincial, trabajando en equipo. Los trabajos que hemos hechos no fueron suficientes, pero estoy seguro de que esto se puede reforzar”, enfatizó.
