Aunque no se generaron situaciones violentas como las del sábado, centenares de militantes oficialistas volvieron a concentrarse este domingo frente a la casa de la vicepresidenta Cristina Kirchner, en el barrio porteño de Recoleta.
Las manifestaciones fueron pacíficas. No hubo vallas del Gobierno porteño en las inmediaciones del domicilio de la vicepresidenta y tampoco hubo intervención de la Policía de la Ciudad, tal como habían acordado funcionarios del Gobierno nacional y del Gobierno porteño.
No obstante, funcionarios de Horacio Rodríguez Larreta denunciaron que el kirchnerismo incumplió la tregua acordada, ya que sus militantes intentaron acampar en plena calle Juncal para “bancar” a la vicepresidenta.
“Quieren la provocación constante para generar la violencia”, dijo el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Marcelo D’Alessandro. Este domingo no intervino Rodríguez Larreta, quien el sábado por la noche había convocado a conferencia de prensa para responsabilizar a la vicepresidenta por la conducta violenta de sus seguidores.
La presidenta del PRO, Patricia Bullrich, consideró anoche que la ciudad debería volver a instalar vallas de seguridad. “Hoy la calle la tiene la militancia exaltada, no la tiene el Gobierno, ni el orden, y mucho menos los vecinos”, indicó anoche a TN, y recalcó que “quien está a cargo de la Seguridad no puede tener miedo”, en obvia referencia a Rodríguez Larreta.
Buena parte de la dirigencia política nacional siguió discutiendo por las redes sociales. También circularon profusamente las imágenes que muestran una actuación violenta de la Policía de la Ciudad contra el diputado Máximo Kirchner y otras imágenes que dieron lugar a interpretaciones variadas:dos volquetes repletos de escombros que el sábado fueron llevados a la zona de la manifestación y que este domingo fueron retirados. El kirchnerismo insiste en que se trató de una maniobra para instigar a los manifestantes a atacar a pedradas a la Policía, algo que no ocurrió.
Sin violencia
Este domingo, la manifestación comenzó durante la mañana en las inmediaciones de la ya emblemática esquina de Recoleta. Al principio era modesta la convocatoria, pero a la tarde la aglomeración fue importante e incluso llegaron a la zona tres colectivos repletos de manifestantes, que elevaron el tono de los cánticos y durante algunas horas cortaron las calles. El Gobierno porteño sostiene que esa acción implicó una ruptura de lo acordado el sábado.
La vicepresidenta salió de su casa al mediodía luego de saludar a algunas personas que habían pasado la noche en el lugar. Se subió a su auto y se dirigió rumbo a la plaza Montevideo, acompañada por un cordón de militantes, para a ir a almorzar con su hija Florencia Kirchner.
Cerca de las 20 regresó y volvió a saludar a la militancia, mientras caminó entre la muchedumbre que levantó sus celulares para filmarla.
Según los trascendidos, en las negociaciones del sábado se habían coordinado “cortes controlados”, pensados para cuando Cristina Kirchner entrara o saliera de su domicilio. Lo que ocurrió fue que los cortes de tránsito fueron más extensos tras la llegada de un grupo de personas que llevaba la bandera de “Ateneo Néstor Kirchner Ituzaingó”.
La diputada de Juntos por el Cambio María Eugenia Vidal apuntó directamente a la vicepresidenta. “Si Cristina no deja de alentar este tipo de manifestaciones será responsable de los hechos de violencia que vengan”, expresó en diálogo con Noticias Argentinas.
Al mismo tiempo, Vidal se manifestó en contra de los dichos del presidente Alberto Fernández, quien acusó al Gobierno de la Ciudad de ejercer “violencia institucional” contra los militantes K. Para la referente de Juntos por el Cambio, los que buscan la violencia son los partidarios del kirchnerismo.
Incidentes en la casa de Cristina Kirchner
Horacio Rodríguez Larreta dio una conferencia de prensa para expresarse sobre los desmanes protagonizados por los militantes kirchneristas y la Policía porteña.
El jefe de Gobierno porteño aseguró que la manifestación a favor de Cristina Kirchner derivó en un acampe permanente cuyos participantes amenazaron a vecinos, molestaron con ruidos hasta la madrugada, se subieron a los postes de luz, tiraron fuegos artificiales, hicieron asados en la calle y acabaron con la tranquilidad del barrio.
“Una cosa es una manifestación y otra cosa muy diferente un plan organizado de ocupación del espacio público. Eso no lo podemos permitir. Por eso anoche, después de que se desconcentraron los manifestantes para evitar situaciones de tensión, dispusimos un vallado para recuperar el espacio público para todos los vecinos y devolver la vida normal al barrio, después de cinco días de alteración. Siempre con la paz como objetivo”, dijo Larreta.
María Eugenia Vidal, diputada de Juntos por el Cambio, dijo que Cristina Kirchner fue la única responsable de los incidentes. “Si Cristina no deja de alentar este tipo de manifestaciones será responsable de los hechos de violencia que vengan”, expresó en diálogo con Noticias Argentinas.
“Me parece que es erróneo hablar de violencia institucional cuando el saldo de los enfrentamientos del sábado son 12 policías heridos y ningún manifestante hospitalizado. Entonces, ¿dónde hay que buscar a la violencia? ¿En qué sector de la política?”, se preguntó la exgobernadora.
