No fue una hazaña ni una remontada histórica, fue una paliza electoral. Contra todos los pronósticos de sondeos que volvieron a mostrar una desconexión asombrosa con la realidad, Sara Majorel, la candidata que eligió el intendente Pedro Dellarossa para sucederlo, se impuso por una diferencia de 17 puntos sobre Verónica Crescente, del peronismo schiarettista.
La mujer será la primera jefa municipal en la historia de Marcos Juárez.
Escrutado el 100% de las mesas (sobre 24.177 electores habilitados, votó el 69%), Majorel ganó con el 55,15% (8.965 votos) sobre Crescente, de Unidos por Marcos Juárez, que sumó el 38,49% (6.257 votos). Tercero terminó Guillermo Massa (2,28%), de Encuentro Vecinal, y cuarto se ubicó Nicolás Barrera (1,43%), del Partido Laboralista.
La elección quedó liquidada antes de las 19, apenas una hora antes del cierre de los comicios. En el búnker de Juntos por el Cambio fueron suficientes seis mesas para confirmar una tendencia imposible de descontar en sólo 70 mesas de votación. Con ese puñado de electores escrutados, el margen ya era de unos 300 votos. Las brechas entre Majorel y Crescente eran de un piso de 35 hasta los 80 votos de diferencia. Cuando se llevaban cargadas 11 mesas, el margen ya era de 600 sufragios. Irremontable para Hacemos por Córdoba. Allí estalló el primer festejo, ante la incredulidad de algunos que buscaban explicaciones que nadie pudo encontrar en medio de la euforia.
La victoria fue transversal en toda esta pujante ciudad del sudeste provincial. La contundencia del triunfo del oficialismo fue tan potente que mejoró, incluso, el resultado de 2018, cuando Dellarossa se impuso a Eduardo Foressi, que en estos comicios fue candidato a vice de Crescente, resignando su candidatura por orden del Panal.
La exfuncionaria de Dellarossa, que pegó el portazo cuando el intendente optó por Majorel y generó un tsunami en el oficialismo local, no le aportó votos al peronismo. La derrota del PJ de este domingo fue por mayor amplitud que la de 2018, cuando la diferencia fue de 15 puntos.
Para Hacemos por Córdoba, el “experimento Crescente” resultó un rotundo fracaso electoral. Motorizado por números de encuestas que avizoraban la posibilidad de un “golpe” en la tierra donde nació Cambiemos, el gobernador Juan Schiaretti se comprometió personalmente, con visitas semanales y promesas de acompañamiento para nuevas obras para los marcosjuarenses, como pocas veces se lo había visto para una contienda local.
El domingo por la noche, con un tuit, saludó a la nueva intendenta.
“La gente valoró la gestión de Pedro y votó en consecuencia. Las encuestas nos decían otra cosa”, se lamentaron calificadas fuentes del Panal.
Festejo y lanzamiento
En medio de los festejos por la rotunda victoria, Dellarossa le dijo a La Voz que pugnará por una candidatura a gobernador en 2023.
“Siempre dije que iba a ser candidato y ahora, con este impulso, iré por ese objetivo”, adelantó el hijo del vecinalista Henry Dellarossa, que en 2014 se alió con el PRO y la UCR y logró acceder al poder en una apretada elección.
En el palco de la victoria, Juntos por el Cambio plantó a los principales aspirantes provinciales del año próximo. Luis Juez -que viajó seis veces a Marcos Juárez durante la campaña- y Rodrigo de Loredo rodearon a Dellarossa y a Majorel. También estuvieron Mario Negri –uno de los primeros en llegar este domingo a la ciudad–, Soher El Sukaria y Laura Rodríquez Machado. Todos hablaron de que esta elección de Marcos Juárez marca el inició del “kilómetro cero” y representa el “primer paso” para Juntos por el Cambio a nivel provincial.
Como se preveía y pese a que los propios protagonistas reconocen en privado los límites locales que tiene la elección, el resultado favorable fue utilizado para proyectar con optimismo el 2023, cuando la oposición quiere poner fin a la larga hegemonía del PJ en la Provincia.
Horacio Rodríguez Larreta, Mauricio Macri y Patricia Bullrich llamaron a Dellarossa y a Majorel para felicitarlos por el triunfo. La flamante intendenta les agradeció a los tres desde el palco de la victoria.
De las tres figuras del PRO, la que más puso recursos y equipos a disposición de Juntos por Marcos Juárez fue el alcalde porteño. Allegados suyos estuvieron en los últimos días en esta ciudad y reportaron al instante desde la apertura de los comicios hasta el momento de la celebración. Ninguno de los tres barajó en serio este domingo la posibilidad de viajar para estar a la hora de la celebración.
“La sociedad valoró esta gestión de ocho años a la que le dio continuidad con Sara. Ese es el secreto de esta victoria. Nunca creímos que estábamos abajo como decían algunos que buscan instalar realidades que no son”, afirmó Dellarossa con dardos hacia los encuestadores.
Sobre las críticas que recibió por la elección de Majorel sobre Crescente, aseguró: “Sabía que no me había equivocado. Somos un equipo y Sara demostró en esta campaña que será una excelente intendenta. La gente respaldó a un equipo de trabajo”.
Majorel, en tanto, afirmó que el triunfo “refleja el sentir de una ciudad que viene mejorando con el correr de los años”.
“Sabíamos que los marcosjuarenses nos iban a acompañar una vez más”, completó, mientras abrazaba con fuerza y colmaba de besos a su pequeña nieta.
Los festejos en la sede partidaria se extendieron hasta pasadas las 21. Minutos después y vistiendo la misma campera inflable color gris que lo acompañó durante toda la jornada, Dellarossa ingresó a El Viejo Bar, un tradicional local gastronómico del centro de esta ciudad, donde fue recibido por los presentes con un fuerte y caluroso aplauso.
El día había terminado para él. Su candidata ganó con contundencia y el triunfo le pertenece a Dellarossa en toda su extensión. Su ciudad, con la potencia que sólo el voto popular tiene, lo premió con creces en las urnas.
