A Javier Milei no le gusta que le citen el famoso teorema de Baglini: “Cuanto más lejos se está del poder, más irresponsables son los enunciados; cuanto más cerca, más sensatos y razonables se vuelven”.
Pero lo cierto es que el candidato de La Libertad Avanza tuvo diversas etapas en sus propuestas electorales, al menos en las declaraciones públicas. Una antes de las primarias, otra cuando pasó a la elección general como el candidato más votado de las Paso y otra cuando entró a la segunda vuelta que se define este domingo.
Así y todo, la plataforma exigida por la Justicia electoral es una de la más extensas, no tuvo modificaciones y no contiene esas propuestas disruptivas y de alto impacto que hizo el libertario en otros ámbitos de la campaña electoral.
El foco de la propuesta de Milei es el económico, con una idea destacada que es la dolarización, que transitó el mismo camino de las demás proposiciones que rompieron con los moldes. En este caso, el candidato libertario mantiene la dolarización, pero aclarando que es a mediano plazo con una serie de reformas y acciones previas.
El eje central es el fuerte recorte del gasto público del Estado, privatización de las empresas estatales deficitarias, fuerte plan de infraestructura con inversión privada y una reforma tributaria que impulse una baja de los impuestos, la flexibilización laboral para la creación de empleos en el sector privado y una apertura unilateral al comercio internacional.
Para Milei, las relaciones comerciales con el mundo deben definirlas los privados, mientras sólo postula como plan para las Relaciones Exteriores un vínculo aceitado con Estados Unidos e Israel.
Menos impuestos
En lo impositivo, se propone la eliminación de retenciones y concesiones por la explotación de recursos naturales.
Promueve la eliminación de subsidios para ir a esquemas “más realistas” en las tarifas de los servicios públicos. En el debate, sostuvo que la eliminación de subsidios tiene que ir de la mano de la recuperación de la economía.
En la segunda etapa, plantea una reforma previsional para recortar el gasto del Estado en jubilaciones y pensiones de los ítems que más generan el déficit fiscal alentando un sistema de capitalización privado, junto a un programa de retiros voluntarios de empleados públicos y achicamiento del Estado.
Recién ahí aparece la tercera etapa que contempla la eliminación del Banco Central, previo dejar de emitir y eliminar todos los cepos, para avanzar a un esquema de “libre circulación de divisas”, conocido como la dolarización.
Salud y educación
Hay una tercera generación de reformas, como viene planteando el libertario, que incluyen la reforma del sistema de salud, impulsando el sistema privado y fomentando la competitividad libre entre empresas del sector, más una reforma del sistema educativo, donde coexistan lo público con lo privado pero se fomente la competencia entre las instituciones educativas.
La plataforma de La Libertad Avanza arranca con la idea de los “vouchers” en educación para subsidiar la demanda (alumnos) y no la oferta (escuelas).
En salud, Milei aclara que no habrá ajustes en el sistema público pero sí mayores controles para evitar el malgasto de recursos y eficientizar la cobertura. Además, postula la defensa de la vida desde la concepción, aunque el derecho a la interrupción del embarazo está garantizado por una ley nacional.
La idea de eliminar es fusionar salud, educación y desarrollo social en una megaárea de capital humano “a fin de elaborar políticas públicas transversales que garanticen la no intromisión de un área en la otra que terminen interfiriendo en la obtención de los mejores resultados”.
Milei se ha pronunciado en contra de los planes sociales, pero aclaró que los mantendrá mientras dure la crisis económica.
Seguridad
En materia de seguridad, la propuesta central es la construcción de cárceles por sistema de gestión público-privada y la “militarización” de esos establecimientos penitenciarios.
Se define a favor de bajar la edad de imputabilidad de los menores, actualmente en 16 años.
Milei impulsa la agilización de los procesos penales y dice que enviará leyes al Congreso “para eliminar de la legislación penal cláusulas garantistas”. En los debates, apuntó directamente contra el exmiembro de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni, como el responsable de la falta de persecución penal a los delincuentes.
Respecto a su controvertida idea de la libre portación de armas, Milei y los suyos se han remitido a lo expuesto en la plataforma: “Sobre la tenencia de armas de fuego planteamos la desregulación del mercado legal y proteger su uso legítimo y responsable por parte de la ciudadanía”, con el cumplimiento efectivo de lo normado en la actual legislación.
