Pese a los esfuerzos del oficialismo por bajarle el tono al nuevo escándalo que sacude a la Policía de Córdoba –con altos jefes tras las rejas y acusaciones de asociación ilícita–, en el Centro Cívico aseguran de manera enfática que la continuidad de Juan Pablo Quinteros “jamás” estuvo en duda.
No sólo eso: fuentes oficiales revelaron que el viernes por la noche, el gobernador Martín Llaryora recibió al ministro de Seguridad en su despacho para mantener una extensa reunión que se prolongó por más de dos horas. Se habrían analizado distintas alternativas para recuperar la iniciativa en materia de seguridad, luego del sacudón por la detención del jefe de la Policía Caminera, Maximiliano Ochoa Roldán.
En los próximos días, se espera una batería de proyectos de ley que llegarán a la Legislatura, acompañados de otras medidas con un mismo propósito: enviar un mensaje claro a una fuerza policial golpeada por la conmoción interna de una nueva red de presunta corrupción.
Entre los cambios, uno de los más relevantes sería eliminar la posibilidad de que efectivos que son abogados puedan seguir conservando la matrícula activa. Una medida que, lejos de cerrar conflictos, podría abrir otros.
Se comenta que en el Tribunal de Conducta Policial hay varios agentes que son defendidos por sus propios compañeros abogados, con uniforme. Y esos defensores cuentan, según se denuncia, con información “privilegiada” para proteger a sus clientes, muchos de ellos sancionados por graves irregularidades.
Otro frente complicado es el de los ascensos. Se está buscando una fórmula distinta para reestructurar ese mecanismo, con la intención de reducir el impacto sobre Quinteros, hoy bajo fuego cruzado por haber promovido a algunos de los jefes que ahora están detenidos.
Mensajes internos y números en análisis con vistas a la definición por las listas
Mientras Juan Schiaretti juega al misterio respecto de una eventual candidatura a diputado nacional y la mesa chica de Martín Llaryora remarca la “necesidad” de que el exgobernador “juegue”, el actual mandatario le hizo llegar a su antecesor un mensaje claro: “O es candidato, o se corre”, dicen que le mandó a decir por un tercero.
En el peronismo saben que el escenario de enfrentar a Javier Milei será complejo, por lo que quieren comenzar cuando antes a desplegar la estrategia de campaña. No menos cierto es que la foto de Schiaretti y Facundo Manes en Buenos Aires fue un bálsamo en el Panal, donde apuestan todo a una candidatura de “el Gringo”.
Cerca de Llaryora dicen que las encuestas que manejan le darían un triunfo a Schiaretti sobre Agustín Laje, a quien miden como candidato de La Libertad Avanza, sobre todo si Diana Mondino compite con un sello liberal y cosecha al menos nueve puntos.
En esa encuesta, los llaryoristas tienen a Natalia de la Sota con nueve puntos. Dicen que le hicieron llegar el sondeo para convencerla de que no vaya sola. “Nos quita unos puntos que necesitamos y se va a quedar sin banca”, dicen que le avisaron. En la misma encuesta —aseguran en la sede del Gobierno—, Rodrigo de Loredo no cruzaría el umbral de los dos dígitos.
En el interior, el cordobesismo ya está de campaña
Sin aún definir nombres propios de candidatos, pero con una orden clara, el gobernador Martín Llaryora activó a su tropa: legisladores e intendentes oficialistas deben salir al territorio, recorrer el interior y hacer visible la gestión.
Así lo hicieron días atrás la vicegobernadora Myrian Prunotto y el ministro de Cooperativas y Mutuales, Gustavo Brandán, quienes compartieron un acto en Colonia Tirolesa, bastión del llaryorismo liderado por el intendente Juan Domingo Panichelli.
La actividad política también se intensificó en Punilla. El pasado martes, en Villa Carlos Paz, tuvo lugar una cumbre de intendentes oficialistas. La convocatoria fue encabezada por Mariana Caserio, presidenta del partido en el departamento y actual vicepresidenta del Ente Regulador de Servicios Públicos (Ersep). La mayoría de los jefes comunales acudió a la cita para comprometerse con la campaña para apoyar la lista que será bendecida por el gobernador.
Entre los asistentes, se contaron Raúl Cardinalli (Cosquín), Mario Sariago (Parque Síquiman), Pablo Alicio (La Cumbre), Ariel Moyano (San Antonio de Arredondo), Fabrizio Díaz (Capilla del Monte), Juan Guevara (San Esteban), Fabián Flores (Mayu Sumaj), Ana Gaitán (Cuesta Blanca), Omar De Giovanni (Santa Cruz del Lago), Carla Bruno (Cabalango), Jorge Bustamante (San Roque), Miguel Moreno (Casa Grande) y Marisel Sánchez (Charbonier).
El significado político de la reunión no es menor. Punilla es uno de los departamentos donde Llaryora perdió en las últimas elecciones provinciales frente a Luis Juez. Ahora, el cordobesismo intentará recuperar ese territorio en octubre.
De Loredo no bajará el video falso de Llaryora hecho con IA
Pese a la advertencia del gobernador Martín Llaryora de que podría recurrir a la Justicia por sentirse injuriado por el video que publicó el diputado Rodrigo de Loredo en el que falsea dichos del titular del Panal, el radical mantendrá las publicaciones en sus redes sociales.
“Disculpas, cero”, redobló la apuesta el líder de la UCR cordobesa luego de que Llaryora le reclamara que bajara la publicación y le pidiera disculpas. Nada de eso sucederá. De Loredo aseguró que sólo lo hará si “Llaryora baja los impuestos”, algo que claramente no está en los planes del mandatario provincial.
En el entorno de De Loredo consideran “exitosa” la acción, al margen de las críticas generalizadas que recibió del “círculo rojo”, que le cuestionó haber cruzado un límite al poner en boca de Llaryora palabras y conceptos que este nunca dijo.
Las mismas fuentes creen, además, que el escándalo desatado por la detención del jefe de la Policía Caminera actuó como una confirmación de que “el Llaryora verdadero miente y el Llaryora de la inteligencia artificial es el que dice la verdad”.
De hecho, el comunicado del bloque de legisladores radicales sobre las detenciones de policías terminó con una frase que hace referencia a ese aspecto y que cierra el círculo de lo que instaló De Loredo con su video: “A los cordobeses les decimos: esto no es inteligencia artificial, esta es la realidad de nuestra provincia”.
