Tras participar en el multitudinario desfile cívico militar de Río Cuarto, el gobernador Martín Llaryora agradeció al presidente Javier Milei por haber elegido a Córdoba para los actos patrios y abogó porque la visita se viva como “una fiesta popular” y una “muestra de respeto institucional que caracteriza a los cordobeses”.
Admitió distintos “temas pendientes” entre la Provincia y la Nación, pero dijo que no es la oportunidad de conversar sobre esos planteos. Sólo adelantó que buscará acordar con Milei que la Provincia pueda finalizar obras públicas nacionales cuya paralización representa “un peligro”, como la inconclusa autovía Río Cuarto-Holmberg (donde se han sucedido siniestros en los últimos días).
“Hay muchas obras en las ciudades, un programa que se llamaba ´Argentina hace´, tenemos que charlarlo con los intendentes. Si la Nación ha decide no continuar, no perdamos tanto tiempo, pongámonos a trabajar todos juntos y entre todos demos una mano a la Argentina, que es una mano al gobierno”, sostuvo.
Deslizó que la Nación podría pasarle a la provincia el financiamiento internacional que tenían ciertas obras nacionales. “Juntémonos con los intendentes. Son obras que se están deteriorando, causan peligro a la gente (…).Terminemos las obras en cada una de las ciudades, Argentina no puede parar, esa es la manera de festejar el 25 de mayo”, agregó.
Misiones, semejanzas y diferencias
Consultado sobre la Ley Bases, el gobernador dijo que “esperaba que a esta altura ya estuviera aprobada”. “Esa ley tiene que salir en conjunto, hay que aceptar las modificaciones (…), en el régimen de inversiones hay puntos que mejoran la ley. Si damos condiciones para que vengan a invertir (…) hagamos un régimen que también contemple fomentar la industria nacional y los servicios, ayudas para el trabajo argentino”, dijo.
En relación con la situación de Misiones, Llaryora opinó que “la crisis muestra la necesidad de que las provincias tengan los recursos que necesitan”.
“Las provincias somos uno de los factores principales que permiten que tenga superávit el gobierno nacional. En Córdoba no nos llegan los recursos educativos, pero mantenemos el incentivo; están paralizados los fondos a la Caja, pero seguimos pagando las jubilaciones; no llegan los subsidios de transporte, pero seguimos con los boletos educativos y sociales”, remarcó.
Tras solidarizarse “con el pueblo” misionero, se ocupó de destacar y reivindicar que esta vez “el gobierno nacional no dejó sola a la provincia de Misiones como le pasó a Córdoba con el anterior gobierno, en el 2013, hay una gran diferencia”. “Si el gobierno tiene que ayudar que ayude porque no me gusta este caos”, agregó.
Entre otros conceptos, Llaryora mencionó de los “vergonzantes” números de la pobreza, calificó de “malditas” a las retenciones, habló de los problemas estructurales del país pese a su potencial productivo. “Nos hemos equivocado mucho para llegar a esta situación y tenemos que tomar esta oportunidad histórica y sacar a la Argentina de la pobreza potenciando todo lo que tenemos”, proclamó, minutos antes de recibir al presidente en Córdoba.
