La deuda de Córdoba alcanzó los 392.457 millones de pesos, según los datos publicados por la Provincia que llegan hasta el 31 de octubre.
El stock del pasivo del Panal es un 6,5% más alto que un mes antes y está un 47,6% por encima de octubre de 2021, en ambos casos, en términos nominales, es decir, sin tener en cuenta la inflación.
Del total de poco más de 392 mil millones, el 96,8% está nominado en moneda extranjera, un porcentaje que no deja de crecer desde julio de 2020, cuando tocó el piso del 88,6%.
Del stock de deuda en moneda extranjera, el 92,8% está nominada en dólares (2.247,8 millones de dólares), el 5,9% en euros (144,8 millones de euros) y el 1,3%, en dinares kuwaitíes (9,3 millones de dinares).
El resto del pasivo lo conforman 12.552 millones en moneda nacional y otros instrumentos atados al peso.
La suba de octubre se explica prácticamente en su totalidad por el incremento del valor del dólar oficial, que trepó poco más del 5% el mes pasado. El resto, se relaciona con el ingreso de nuevos desembolsos de fondos árabes, que es el único financiamiento que sigue sumando Juan Schiaretti en los últimos meses.
Igualmente, aunque crecieron un 475% interanual, los préstamos en dinares no representan más del 1,2% del total.
Con el dólar oficial contenido y la inflación desbocada en los últimos 12 meses, la deuda de Córdoba, medida en pesos, se viene licuando. En la comparación interanual en moneda argentina, la deuda creció un 47,6%, con una suba de precios cercana al 90%.
En términos reales, la deuda en diciembre del año pasado era de 454 mil millones de pesos, 62 mil millones de pesos menos que el 31 de octubre.
Siempre descontando la inflación, el menor volumen de deuda se dio en 2015, con 238 mil millones de pesos. El pico de los últimos años fue en 2020, antes de la reestructuración, con 596 mil millones de pesos.
Medida en dólares, la deuda de Córdoba ascendía el 31 de octubre a 2.501 millones, 247 millones de dólares menos que cuando tocó el máximo en 2020. El menor volumen se registró en 2015 (1.419 millones de dólares), previo a la emisión de los últimos grandes títulos en moneda extranjera.
