La oposición de Juntos por el Cambio (JPC) afronta una semana clave en su reacomodamiento interno de cara al inicio del nuevo período legislativo que el próximo martes dejará inaugurado el gobernador Juan Schiaretti con su discurso.
La fractura expuesta en JPC a raíz de la sanción de la ley que regula (legaliza) el juego online en la provincia, en la última sesión de 2021, podría acentuarse aún más.
Los radicales Juan Jure y Elisa Caffaratti analizan los pasos a seguir dentro de la bancada opositora, tras el choque de posturas que significó la aprobación de la polémica norma que recibió el apoyo oficialista y que activó el alejamiento de la bancada de la primera minoría de las dos radicales del riñón negrista.
El receso legislativo puso un manto de piedad, fue un bálsamo en la herida, pero con el retorno a las sesiones ordinarias se esperan definiciones de alto voltaje político.
Hay una marcada expectativa en torno al realineamiento radical. Todas las miradas, incluida las oficialistas, apuntan hacia los radicales Jure y Caffaratti, que por estos días definen si seguirán en JPC o desembarcarán en el bloque UCR comandado por Marcelo Cossar. Podría haber una tercera opción: bloque unipersonal.
Las legisladoras Daniel Gudiño y Patricia de Ferrari confirmaron su pase a la bancada radical, tras alejarse del bloque que integraban junto a Orlando Arduh y sus socios del PRO, por las diferencias insalvables que se acentuaron con el juego online.
Las negristas adoptaron esta decisión en línea con la postura de la mesa ejecutiva del Comité Central de la UCR que dictaminó que los cuatro parlamentarios radicales de JPC, quienes votaron en contra de la polémica ley, se sumen a Juntos UCR.
En este sentido, las lecturas políticas que se hacen en los pasillos de la Legislatura advierten que Jure y Caffaratti no tendrían margen para no acatar el pedido de la cúpula partidaria. ¿Sería un desaire?, se preguntan algunas voces. Sobre todo de la deloredista Caffaratti que llegó a la banca por la lista 3 (UCR) y luego se pasó a JPC.
En el bloque que hasta ahora conforman tres radicales y cuatro macristas se analiza la posibilidad de un recambio en su conducción. El radical Arduh quedó muy expuesto al cargarse sobre sus hombros la férrea defensa de la iniciativa que recibió una andanada de críticas de su partido y de organizaciones sociales y religiosas.
Por esta razón, el boina blanca afronta un proceso sancionatorio que se encuentra en manos del Tribunal de Conducta de la UCR. Por ahora, está suspendida temporalmente su afiliación.
Las versiones dan cuenta que el baldassista Alberto Ambrossio podría asumir la titularidad de JPC con el propósito de oxigenar y dar una señal hacia los radicales que tienen un pie afuera de la bancada.
La salida de JPC de estos radicales activaría una reconfiguración de la primera minoría opositora. Si la UCR sigue engrosando sus filas, reclamará esa representación, con un perfil opositor más duro contra el peronismo en el poder. También abre la puerta a mejores posiciones en puestos legislativos y de otros estamentos de su órbita.
