La remota isla de Annobón, un pequeño territorio africano de 17 kilómetros cuadrados en el océano Atlántico, atraviesa una “gravísima violación a los derechos humanos” por parte del régimen de Guinea Ecuatorial, según denunció el doctor Aitor Martínez, abogado de la isla ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Las declaraciones de Martínez se producen pocos días después de que el primer ministro de Annobón, Orlando Cartagena Lagar, solicitara ayuda al gobierno argentino.
Martínez señaló en declaraciones radiales que la situación en Guinea Ecuatorial debería “preocupar a toda la comunidad internacional”. Las violaciones a los derechos humanos se agravaron, con Annobón sufriendo “todo tipo de ultrajes” por parte de Guinea Ecuatorial.
Como ejemplo, mencionó que durante los años 80, la isla fue utilizada como un “vertedero internacional de desechos tóxicos”.
El detonante más reciente que llevó al primer ministro Cartagena Lagar a recurrir al Consejo de Descolonización de la ONU fueron las exploraciones recientes con dinamita realizadas por el gobierno ecuatoguineano en territorio annobonés, que afectaron “gravemente” a la población local.
En respuesta, un grupo de ciudadanos firmó una carta titulada “Voz del pueblo annobonés” en reclamo contra las detonaciones reiteradas.
La reacción del jefe de Estado de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang fue violenta. Según el abogado, Guinea Ecuatorial llevó a cabo una “redada masiva” contra todos los firmantes del manifiesto, resultando en la detención de 42 personas.
La isla fue militarizada y el Ejército de Guinea Ecuatorial cometió “gravísimas violaciones a los derechos humanos” dentro de la isla.
Los ciudadanos detenidos no recibieron “ni siquiera un habeas corpus” y estuvieron “meses desaparecidos” en comisarías de la capital, San Antonio de Palé.
Esta situación se encuentra actualmente sometida al Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que “probablemente se va a pronunciar en las próximas semanas”.
El primer ministro Cartagena Lagar describió la situación de la isla como “dramática” y un “asedio militar de Obiang y de su clan de militares que no tienen escrúpulos”. La población vive en la “miseria absoluta”, con carencias de agua, sanidad, luz y colegios para los niños.
Además, denunció que los militares se dedican al “abuso infantil como métodos de humillación a la población”, calificando la situación humanitaria de “increíble”.
La población sobrevive con tubérculos y pesca artesanal, lo cual es insuficiente, y debido a que la población está “diezmada” y los militares están “abusando de las niñas”, la gente se ve “obligada a viajar”.
El funcionario concluyó describiendo la situación como un “terrorismo y genocidio absoluto contra nuestro pueblo”.
Annobón tiene una historia colonial particular, pasando por manos portuguesas, holandesas y españolas, y llegó a integrarse dentro del Virreinato del Río de la Plata.
En este contexto, el movimiento político “Ambô Legadu”, del que forma parte Cartagena Lagar, convocó “asambleas generales del Pueblo Annobonés” desde 2021 para abordar la cuestión de la soberanía. El grupo solicitó a las autoridades de Guinea Ecuatorial la autodeterminación del pueblo de Annobón, un reclamo que fue ignorado.
Martínez trazó un paralelismo con el reclamo argentino sobre las islas Malvinas, asegurando que la conexión con el caso de Annobón “es absoluta”. El objetivo es que Annobón “pase a formar parte del Comité de Descolonización de la ONU, y que en la isla se pueda votar en forma de autodeterminación cuál va a ser su futuro político”.
