El papa Francisco nombró al recientemente designado cardenal Ángel Sixto Rossi, arzobispo de Córdoba, como miembro de del dicasterio de culto.
Los dicasterios de la Curia romana son departamentos u organismos especializados para la administración de la Iglesia Católica. En este caso Rossi integrará el dicasterio de culto, que se vincula con la expresión litúrgica y la celebración de los sacramentos. Este organismo está presidido por el cardenal inglés Arthur Roche.
“El dicasterio ayuda a los obispos diocesanos y a las conferencias episcopales a promover, con medios eficaces y adecuados, la acción pastoral litúrgica, en especial en lo que respecta a la celebración de la eucaristía y de los demás sacramentos y actos litúrgicos, para que los fieles participen más activamente. Junto con las conferencias episcopales, invita a la reflexión sobre formas posibles de liturgias inculturadas y acompaña su contextualización, informó el Arzobispado de Córdoba en un comunicado.
“La intención es que el culto en general salga a veces del rigor y que sea más una expresión de fe. Que los templos no sean aduanas de control de quién entra sino comunidades de puertas abiertas”, advirtió el téologo Fernando Kuhn.
El papa Francisco y el cardenal Ángel Rossi se conocen muy bien. Fue el entonces padre Jorge Bergoglio quién lo recibió en su ingreso a la la orden jesuita de la Compañía de Jesús. Bergoglio se convirtió en su director provincial y más tarde en el rector de la casa de formación donde se encontraba. Fruto de esos años surgió un estrecho vínculo que hoy se mantiene.
El Arzobispado de Córdoba aclaró que Rossi participará desde Córdoba en el dicasterio de Culto y solo se trasladará en el caso que el Papa se lo solicite o por reuniones particulares del organismo.
Este nombramiento sucedió solo unos días después de que el arzobispo Rossi fuera “creado” como cardenal y en el mismo momento en que comienza en Sínodo de obispos este miércoles en el Vaticano.
