La reunión del ministro de Economía, Martín Guzmán, con los gobernadores y referentes legislativos de Juntos por el Cambio aún es incierta, aunque la expectativa de la oposición es que el funcionario concurra este martes al Congreso para brindar detalles precisos sobre las diferencias que impiden cerrar un acuerdo con el FMI.
Fuentes oficiales reconocieron a este medio que todavía no se cerró el encuentro. No hay hora, ni fecha, ni lugar. En el ámbito legislativo apuntan al presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, al señalar que él es el encargado de la organización y de la consecuente convocatoria.
En Juntos por el Cambio esperan que el encuentro se produzca el próximo martes, en el transcurso de la tarde, pero sospechan que Guzmán no aportará más información que la que ya comenzó a hacer pública en sus rondas con los gobernadores oficialistas, con empresarios y sindicalistas. Se sabe que la discusión con el Fondo se frenó por la falta de consenso respecto al plan de ajuste para eliminar el déficit fiscal, pero los números son un misterio.
En el Congreso, hay quienes consideran que la reunión se volverá a postergar. “¿De qué le sirve al Gobierno que Guzmán venga a soportar los cuestionamientos de Juntos por el Cambio en este momento?”, indagan.
La reunión entre Guzmán y los referentes de Juntos por el Cambio ya forma parte de una historia de desplantes y tensiones. A pesar de las gestiones que encaró personalmente, el presidente Alberto Fernández no logró la foto de unidad en aquel primer encuentro del 5 de enero, en el que expuso el ministro de Economía en el Museo del Bicentenario: los gobernadores Gerardo Morales (Jujuy), Rodolfo Suárez (Mendoza) y Gustavo Valdés (Corrientes) solamente enviaron representantes de segunda línea, al igual que el cordobés Juán Schiaretti.
En aquel momento, el gran ausente fue el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Al referente del PRO con aspiraciones presidenciales esa posición le generó nuevos roces con Morales, quien públicamente le reclamó a sus socios políticos que “lo mínimo que pueden hacer es escuchar a Guzmán” porque, recordó, la deuda la tomó el gobierno de Cambiemos.
El rol de Morales
Morales fue quien mantuvo los contactos directos con el presidente Fernández y eso también lo convirtió en blanco de críticas de los sectores más duros de Juntos por el Cambio, representados por los denominados “halcones” que responden a la presidenta de Pro, Patricia Bullrich. Las tensiones se trataron de resolver en múltiples reuniones por zoom entre los integrantes de la mesa nacional de la coalición opositora.
Finalmente, se acordó recibir a Guzmán pero en el ámbito del Congreso. Primero se solicitó una reunión del ministro solamente con los representantes de Juntos por el Cambio, lo que generó malestar en las otras fuerzas políticas con representación parlamentaria. Esta cuestión aún no se resolvió y también está en manos de Massa.
“Nosotros solamente estaremos en una reunión de trabajo, si es con todos los bloques y el Ministro, si se hace en el Congreso. Y le pedimos que ya venga al menos con un borrador del proyecto de ley que se vaya a tratar”, dijo a este medio Alejandro “Topo” Rodríguez, el presidente del Interbloque Federal.
Aunque el encuentro aún es incierto, en Juntos por el Cambio adelantan que irán los gobernadores Morales y Valdés. En tanto, el gobernador mendocino no estará presente porque está de vacaciones, pero su lugar lo ocupará Alfredo Cornejo. Y la novedad es que ahora Rodríguez Larreta se comprometió a concurrir.
La nómina de los presentes se completaría con los diputados Mario Negri (UCR de Córdoba), Cristian Ritondo (PRO de Buenos Aires), Juan Manuel López (Coalición Cívica de Buenos Aires) y los senadores Humberto Schiavoni (PRO de Misiones) y Luis Naidenoff (UCR de Formosa), entre otros.
En el Congreso sobran las preguntas ante las dilatadas acciones del gobierno nacional, que todavía no convocó a sesiones extraordinarias y que tampoco presentó el Plan Plurianual que, afirma Guzmán, será una primera aproximación a la carta de intención que se tratará de firmar con el Fondo.
Mientras tanto, el gobierno trató de avanzar en la búsqueda de acercamientos con el FMI porque el calendario de vencimientos de la deuda apremia: en marzo se tendrá que afrontar el primer gran giro de los más de U$S19.000 millones comprometidos para este año, entre capitales e intereses, en el marco del programa que solicitó Macri para acceder a U$S45.000 millones.
Guzmán y el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, le presentaron el viernes a los representantes del prestamista de última instancia el nuevo programa de congelamiento de precios, que se creó con el beneplácito del organismo. Hay un entendimiento respecto a la importancia de establecer una “coordinación de precios y de salarios” para moderar las expectativas inflacionarias.
En tanto, el canciller Santiago Cafiero partirá hacia los Estados Unidos para reunirse, el próximo martes, con Antony Blinken, el secretario del Departamento de Estado de la administración de Joe Biden. Las urgencias también apuntan a alcanzar los consensos internacionales para que el board del Fondo acompañe a la Argentina.
