El gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, enfatizó que el próximo gobierno deberá encarar “un plan de estabilización en serio” para resolver los problemas estructurales de déficit fiscal y falta de divisas, a los que consideró como los principales obstáculos para el crecimiento del país.
A su vez, afirmó que una de las bases para la recuperación de la economía es “generar confianza” a partir de ofrecer “certezas” que garanticen la estabilidad en el largo plazo.
Schiaretti viajó a Buenos Aires para disertar en el 8° Encuentro Federal de la Confederación de la Mediana Empresa, ante un centenar de empresarios pyme.
El mandatario cordobés arribó acompañado por el ministro Industria y Comercio, Eduardo Accastello y el diputado Carlos Gutiérrez. Mantuvo una reunión privada con Alfredo González, presidente de la entidad anfitriona y se retiró sin acceder a preguntas de la prensa que lo aguardaba.
De allí se fue a un almuerzo con el secretario general del gremio de Comercio, Armando Cavalieri. De esa reunión, se informó que “ambos coincidieron en la necesidad de consolidar un proyecto para la Argentina que tenga como bandera la producción, el trabajo y el federalismo”. En marzo habrá una reunión de Schiaretti con la cúpula de la CGT.
Córdoba “for export”
Schiaretti focalizó su presentación de aproximadamente una hora en explicar el modelo de gestión que implementó en la provincia, basado en la articulación de la gestión pública-privada.
En este marco, su palabra fue interrumpida en varias oportunidades con aplausos cuando destacó la necesidad que el sector público apoye al sector privado para el desarrollo y no sea un competidor.
“Para poder trabajar con el sector privado hay que generar confianza y la confianza se genera dando certezas”, señaló. Reiteró que ese trabajo conjunto se debe a la convicción de que “sólo la producción y el empleo permiten a los pueblos progresar”.
El mandatario mediterráneo aprovechó la oportunidad para reiterar su posición sobre la situación institucional del país y pidió “respeto” por la división de poderes. “En Córdoba tenemos como base el respeto a la división de poderes, a la libertad de prensa, y el respeto a las otras fuerzas políticas”, enfatizó.
Schiaretti remarcó que “en Córdoba nadie pretende imponerle cosas al Poder Judicial” y a nadie se le ocurrió hacerle un juicio político a un miembro del Poder Judicial porque no le gusta un fallo”.
Asimismo, puso énfasis en que la situación de equilibrio fiscal que tiene la provincia desde “hace varios años” debe replicarse a nivel nacional. “(En Córdoba)…el equilibrio fiscal da certeza de que no vamos a ir a los viandazos para un lado o para el otro. Solo tomamos deuda para financiar menos del 20% del mayor proyecto de obra pública de la provincia, por U$S 7.800 millones”.
En esa línea, destacó que los datos del Censo 2022 muestran que Córdoba creció más que el resto del país y sumó 630 mil habitantes. “No fue fruto del crecimiento vegetativo de la provincia, ya que más 300 mil migraron de provincias vecinas. Eso nos alegra porque todo lo que hicimos resulta atractivo para que vengan a vivir a la provincia”, dijo.
Schiaretti sostuvo que Argentina “vive en una gran incerteza” y lanzó un duro pronóstico: “No se ve de manera objetiva que esto se va a estabilizar”. En todo su discurso, no tuvo un solo gesto componedor con el Gobierno nacional.
Detonantes
El gobernador sostuvo que el escenario actual obedece a dos detonantes: el déficit fiscal crónico y la crisis cíclica en el saldo de cuenta corriente de la balanza de pagos.
“Estos son los dos temas centrales que Argentina tiene que resolver y no creo que sean imposibles de resolver”, afirmó, en la parte de su discurso que más exhibió su intento de proyección nacional.
En ningún momento hizo referencia a un proyecto concreto y tampoco asumió el rol de candidato presidencial.
Schiaretti recalcó que “los nuevos vientos del mundo le dan una oportunidad al país para genera dólares a través del complejo agroalimentario, del litio, del petróleo y gas, de la minería, y la economía del conocimiento”, sectores a los que sumó la pesca.
Para Schiaretti “la inmensa mayoría de los argentinos piensa que la grieta nos hace daño”. Consultado sobre las medidas que debiera adoptar el próximo gobierno apenas asuma, prefirió excusarse, pero aseguró: “Lo normal es que encaremos un plan de estabilización de la economía en serio. Y eso no significa que uno tiene que mandar a la quiebra a un montón de pymes o despedir gente. No. Lo que hay que hacer es sacar las ‘gorduras’ para lograr el equilibrio fiscal”, dijo.
Asimismo, reiteró que Córdoba no adherirá al plan que propuso el Ministerio de Economía para ponerle un tope a los aumentos de las cuotas de la educación privada.
Cuestionó el intento de Sergio Massa por establecer topes máximos en la suba de las cuotas de los colegios privados. Consideró que la provincia ya tiene su fórmula polinçomica de actualización que se respetará porque, entre otras cosas, no se conoce cuál será el aumento de los salarios docentes –que no fija la Nación, sino las provincias– como para mensurar cómo debieran ser las subas de las cuotas.
