La cotización del dólar tuvo este miércoles un marcado descenso en todas sus versiones, empujado por una mayor liquidación de exportaciones, necesidades de empresas y la emisión de un nuevo título de deuda que quitó pesos del mercado.
El precio de la divisa en el Banco Nación cerró a $ 1.110 para la compra y $ 1.160 para la venta, lo cual representa una baja de $ 25 con relación al martes.
En tanto, el valor mayorista culminó las operaciones a $ 1.133 y $ 1.142, con una retracción de $ 22.
A su vez, el precio promedio para los minoristas en los bancos quedó en $ 1.117 y $ 1.160, con un retroceso de casi $ 30.
La misma tónica se observó en la plaza financiera. El MEP bajó hasta $ 1.167 y el Contado con Liquidación a $ 1.173.
El “blue”, que ahora pasó a ser una cotización marginal, fue el que menos cedió y se mantiene como el más caro a $ 1.190.
Para este escenario confluyen varias razones de distintos orígenes.
Por un lado se aprecia una sostenida liquidación de los agroexportadores, a un promedio de U$S 200 millones por día, apurados por el calendario, dado que el 30 de junio vence la rebaja transitoria de las alícuotas de retenciones y porque además esta semana cuenta dos días menos de operaciones.
“De arranque comenzó a operarse en los niveles del cierre anterior pero la oferta no tardó en aparecer y la presión lo hizo retroceder”, señaló Nicolás Merino operador de ABC Mercados.
Esta oferta también está motorizada por ventas de empresas que necesitan hacerse de pesos para el pago del medio aguinaldo.
Al mismo tiempo, se observa un desarme de posiciones en dólares para sumarse al “carry trade” tras consolidarse el proceso de desinflación en mayo, traducido en la suba de 1,5% en el IPC minorista y en la caída de -0,3% de los precios mayoristas.
Por otro lado, este miércoles el Banco Central realizó la primera subasta del BOPREAL 4. Adjudicó U$S 810 millones sobre los U$S 3.000 permitidos.
Esta suscripción reduce la masa de pesos en circulación lo cual también quita presión sobre el tipo de cambio. El BOPREAL 4 está destinado a empresas con deudas con el exterior o con dividendos atrapados hasta el 12 de diciembre de 2023.
El punto rojo vuelven a ser las reservas que quedaron en U$S 40.168 millones, con una nueva caída de U$S 217 millones. Si bien por las últimas operaciones las reservas superaron los US$ 40.000 millones, la dinámica de continua caída es un foco de atención por parte del mercado.
Reclasificación de deuda
Tras la salida del cepo, el Gobierno espera una decisión clave del mercado financiero que le permita volver a entrar en la consideración de los grandes fondos de inversión globales, lo cual sería una inyección de dólares adicionales.
En las próximas horas global MSCI (Morgan Stanley Capital International) hará su revisión anual de la clasificación de la deuda soberana de los países y la expectativa es que eleve la condición de Argentina, actualmente en consideración marginal.
Los títulos de deuda emitidos por la Argentina están calificados como “standalone market” (mercado independiente), lo cual implica una consideración de tercer orden.
Esta situación le impide a los principales fondos de inversión internacionales colocar fondos de sus clientes en este tipo de instrumentos.
En el gobierno esperan que MSCI revise su listado colocando al país en la categoría de “mercado emergente”, lo que implicaría un cambio profundo en su acceso al financiamiento internacional.
Analistas internacionales estiman que en caso de producirse este cambio, el país estaría en condiciones de recibir hasta U$S 1.000 millones en flujos hacia acciones y bonos argentinos.
Este escenario sería ideal para el gobierno dado que mejoraría el Riesgo País, estancado en la zona de los 650 puntos. Cabe recordar que hasta que este indicador no caiga a la zona de 400 puntos, no hay posibilidades de que el país retorne plenamente a los mercados voluntarios de deuda para refinanciar los abultados vencimientos que se producirán desde el año próximo.
El análisis comenzará este jueves y se espera que la decisión final se comunique la próxima semana.
Las expectativas favorables se fundan en el cambio de rumbo económico que implementó Javier Milei desde que llegó a la presidencia.
Si bien el cepo todavía no ha sido eliminado completamente, sectores del mercado interpretan que la hoja de ruta del Gobierno apunta hacia una mayor apertura y previsibilidad para los inversores que debiera ser bien considerado por MSCI.
El informe evalúa criterios técnicos como la accesibilidad al mercado, la libertad de movimiento de capitales, la estabilidad institucional y regulatoria, y la eficiencia operativa del sistema financiero.
Deuda en alza
La deuda pública bruta de Argentina ascendió a US$ 461.019 millones. Esto significó una baja de US$ 11.901 millones respecto de mayo, pero al mismo tiempo un incremento de U$S 90.342 millones desde diciembre de 2023.
La baja en mayo se produjo por la cancelación de la deuda que el Tesoro Nacional tenía con el Banco Central en Letras Intransferibles.
Lo hizo con el préstamo del Fondo Monetario Internacional (FMI) que ingresó el 14 de abril, pero el proceso se completó en mayo.
Sobre el total de deuda bruta, hubo una baja en moneda extranjera por US$ 13.058 millones y un aumento de la deuda en moneda local por un monto equivalente a US$ 1.155 millones.