El Grupo de los 6 (G6) pidió este jueves “no apresurar los debates de leyes que pueden perjudicar seriamente a la generación de empleo formal en tiempos electorales”.
Se refirió así a la discusión que se inició el martes en el Congreso de la Nación con respecto a la reducción de la jornada laboral, donde 7 proyectos buscan intervenir en las negociaciones colectivas, herramienta clave en la relación entre empleadores y trabajadores.
Los empresarios consideraron que una modificación de la estructura laboral “como lo es la reducción de la jornada requiere de un debate responsable, con la participación de todas las partes involucradas, donde es necesario generar consensos y no apresurar su tratamiento por las presiones coyunturales de la política electoral”, indicó el sector empresarial.
“La brecha de productividad y tecnológica que nos separa con los países desarrollados viene siendo cada vez mayor, especialmente tras la pandemia, donde otros países implementaron políticas y recursos muy agresivos para avanzar en el nuevo contexto global. Por lo tanto, Argentina debería: estabilizar sus condiciones macroeconómicas, reducir el empleo informal, generar empleo formal (el cual prácticamente no crece desde 2012) y promover incentivos al empleo, entre otras medidas, antes de discutir una reforma de este tipo”, agregó en una declaración.
En la actualidad, “Argentina lidera la presión fiscal sobre el sector formal por lo que cambios de este tipo podrían redundar en más impuestos sobre el sector empleador formal”, explicó. Cabe recordar que el principal creador de empleo registrado en los últimos 20 años ha sido el sector público, hizo notar el G6.
“En los últimos años algunos países han modificado su legislación interna para reducir el número de horas trabajadas, sin embargo lo han hecho de manera gradual y con estructuras socioeconómicas muy diferentes a las de nuestro país”, comparó el Grupo empresarial.
El G6, que agrupa a la Asociación de Bancos Argentinos, la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, la Cámara Argentina de Comercio y Servicios, la Cámara Argentina de la Construcción, la Sociedad Rural Argentina y la Unión Industrial Argentina.
Las entidades acordaron además participar de las discusiones a sus representaciones regionales y sectoriales dado el carácter federal del debate.
Rechazo en Córdoba
También el G6 de Córdoba se refirió a la situación en un comunicado, a la que rechazó de plano.
“La duración de la jornada laboral es sólo un aspecto (y no el más importante) de un conjunto de factores que es necesario revisar para generar mayores oportunidades de acceder al empleo en nuestro país”, sostuvo.
El análisis debiera ser “integral y atendiendo a la heterogeneidad de sectores y sus condiciones de productividad”, especificó. En caso contrario, “puede provocar graves impactos en sectores que ya atraviesan dificultades de reconversión y continuidad, agravado por la actual crisis económica”, alertó.
Por otra parte afirmó que en países donde se han promovido cambios en materia de regulación del trabajo “han logrado mejores resultados poniendo en marcha herramientas más eficaces para adaptarse a las nuevas realidades tecnológicas y de hábitos de los trabajadores”. “Una regulación uniforme y poco flexible agravaría antes que mejoraría el nivel de empleo formal en nuestro país”, remarcó.
Por último, y de nuevo atendiendo a la oportunidad de la discusión, “hay urgencias mayores que la política debiera atender como la inflación, las restricciones a importaciones, tipos de cambio múltiples, entre otros”, indicó.
“Un sentido de responsabilidad política en esta coyuntura debería enfocarse en las urgencias actuales y generar una agenda de trabajo consensuada sobre los grandes cambios estructurales que serán necesarios para salir de la crisis actual y retomar un cambio de crecimiento”, concluyó.
