Una vez más quedó demostrado que en política los tiempos son cortos y que los escenarios se alteran sin previo aviso. Resetear es cosa de casi todos los meses; más aún si hay un mensaje de las urnas de por medio.
El tablero electoral cordobés de octubre recién parece activarse. La suspensión de las Paso, más el hecho de que en esta provincia no haya elecciones legislativas domésticas, ha ralentizado las definiciones. Es lógico: recién a principios de agosto vencen los plazos electorales “fatales”. Ese estado previo a la exaltación de los cierres, sin embargo, se vio alterado desde el domingo último. El triunfo libertario en la Ciudad de Buenos Aires (Caba) trastocó el paisaje. Y las piezas buscan un nuevo orden. Nadie esperaba este nivel de cimbronazo.
La celebración porteña del presidente Javier Milei y de su candidato Manuel Adorni empoderó a los libertarios de todo el país, incluidos los de Córdoba, donde el apoyo mileísta es fuerte y la estructura partidaria sigue robusteciéndose.
Al margen de los números, la victoria sobre Mauricio Macri en la casa de los “amarillos” fue también simbólica hacia adentro. Y envalentonó a los “puros” frente a las opciones frentistas. “Ahora vamos a pintar de violeta todo el país”, fue el mensaje del león mayor desde Caba. La manada cordobesa contestó rápido. “Si pudimos en Capital Federal, donde las chances no eran las mejores, ¿por qué no podemos hacer lo mismo en otras provincias?”, infla el pecho un libertario cordobés con voz de mando en el partido.
De igual manera, aclara que “las decisiones sobre candidaturas y la estrategia electoral las toma Karina”. Tras un domingo amargo hace unos meses en Santa Fe, donde La Libertad Avanza terminó tercera en los comicios para convencionales constituyentes, la hermana del Presidente logró revertir el tablero parcial y consolidó su posición de estratega electoral del oficialismo nacional.
En el campamento libertario local también hay novedades. El diputado Gabriel Bornoroni continúa con el armado provincial que inició en 2023. La victoria de Adorni le sirvió al titular del bloque libertario para apaciguar las versiones de una lista mixturada de extrapartidarios para octubre. Además, el regreso a Córdoba de Franco Mogetta es otra señal de fortalecimiento de la estructura interna más “pura”.
El exsecretario de Transporte de la Nación tiene la orden de Karina Milei de “ampliar” la base de La Libertad Avanza y también de contener a expresiones libertarias que hasta ahora estaban relegadas en Córdoba. “Esa es gente valiosa y no queremos que terminen siendo funcionales al peronismo”, dicen cerca de Mogetta sobre la nueva etapa provincial del oficialismo nacional. Mogetta suena para estar en la lista. ¿Encabezarla? Por qué no. Todo es posible aún.
La expectativa de bancas a conquistar es alta: dicen ir en busca de seis de las nueve que Córdoba pone en juego. De darse ese pronóstico, quienes relegarían lugares serían radicales y macristas.
Efectos colaterales y locales
En la noche de la celebración, Milei dejó en claro la nueva regla general: brazos abiertos para todos los extrapartidarios, pero a través de acuerdos con dirigentes no con los partidos. La tabula rasa libertaria tiene condiciones: subordinación. El mensaje retumbó fuerte por estas latitudes, donde el triunfo sobre Macri tiene efectos directos.
El primer impactado es el PRO, que quedó en la peor posición posible. Es el gran derrotado. Si bien aquí no hay por ahora riesgo de drenaje de dirigentes “amarillos” hacia La Libertad Avanza como sí sucede en la provincia de Buenos Aires, el principal problema que enfrenta el partido es hallar otro espacio que quiera asociarse. Evitar competir en soledad en octubre se tornó una necesidad vital. Sin aliados, las chances de lograr bancas son casi nulas.
Este presente aciago del PRO podría replicarse de igual manera en el reparto de lugares en las listas y, por ende, bajar al mínimo las chances de bancas a obtener. En cualquier caso, el PRO se encamina a la peor cosecha propia desde 2013, cuando Héctor Baldassi lideró con éxito la primera propuesta legislativa del macrismo. El amarillo no para de desteñirse también en Córdoba.
Los efectos de los comicios porteños también alcanzan al radical Rodrigo de Loredo. Hasta antes de esa elección, el jefe de bloque de la UCR en Diputados barajaba como una de sus opciones liderar una propuesta frentista que incluyera a las Fuerzas del Cielo. Incluso había mileístas que admitían esa posibilidad. En la nueva realidad, con el fortalecimiento de los libertarios, esa chance asoma cada vez más difícil.
A De Loredo le hubiera convenido un desempeño menos rutilante del mileísmo en Caba. Es una regla de oro de la política: cuando uno se agranda, hay alguien que se achica. Además, el retroceso de Macri también lo perjudica, porque siempre ha sido —y lo sigue siendo— un potencial aliado electoral.
El radical tiene ahora tres opciones a la vista: 1) competir en soledad, como le pide un sector interno de la UCR. Esa alternativa viene siendo rechazada de plano por De Loredo y por el presidente del partido, Marcos Ferrer. 2) cerrar un acuerdo con el PRO de Macri y apuntar a superar los 10 puntos con un techo de 15, lo cual sí lo dejaría cuatro años más en Diputados, pero incómodo en el tablero provincial de 2027. 3) acordar un frente amplio con los libertarios, el PRO y el juecismo, pero sin encabezar.
De Loredo tiene por delante dos meses y medio intensos para evaluar qué le conviene hacer. Su vínculo cercano al asesor Santiago Caputo es un activo que buscará hacer valer en las decisiones por tomar. Hacia dentro del partido, deberá seguir luchando con las pujas internas y el rechazo de varios sectores a cualquier alianza con los libertarios.
El nuevo presente, en cambio, es mucho más amigable con Luis Juez, el otro opositor provincial de peso. A nivel nacional, al senador se le alinearon los planetas. Tomó distancia de Macri meses antes de la debacle porteña y, además, atraviesa un momento de relacionamiento personal estrecho con el presidente Milei.
El último miércoles por la noche, el jefe del Estado lo invitó a cenar en la residencia de Olivos. Compartieron a solas varias horas. Hubo tiempo para charlas de cuestiones personales y también un análisis de lo que pasó en Caba y de lo que viene rumbo a octubre. El líder del Frente Cívico también intensificó su trato con la hermanísima Karina.
Juez dice en público que, si Milei así lo decide, será su candidato en Córdoba dentro de 2027. En privado, el senador va más allá y da a entender que tiene un guiño presidencial al respecto. De todos modos, es cauto. Sabe que resta un largo trecho para esa fase y que lo que hoy está alineado puede moverse. “Me fue excelente”, sintetiza sobre su último encuentro cara a cara con el primer mandatario.
