El Gobierno nacional blanqueó que aspira a obtener más del 40% en la elección nacional del 26 de octubre, que cambiará la composición del Parlamento y será decisiva para la continuidad del plan económico.
“Yo creo que con un 40% ganamos en la provincia de Buenos Aires y ganamos en las nacionales. Por ahí algunos puntos más, pero yo creo que vamos a sacar más que eso en lo nacional, seguro”, afirmó el jefe de Gabinete, Guillermo Francos.
En las últimas horas, fue el propio ministro de Economía, Luis Caputo, quien condicionó la continuidad del programa económico al resultado electoral.
El ministro justificó las últimas medidas tomadas, en particular en el plano monetario, que disparó la suba de tasas, a sostener el precio del dólar hasta las elecciones.
Por otro lado, un grupo cada vez mayor de analistas aseguran que el gobierno deberá formular un cambio en su plan económico luego de las elecciones, en principio, para cumplir con el acuerdo con el FMI.
Por otro lado, la Casa Rosada necesita sumar voluntades en el Congreso Nacional para pasar las reformas estructurales que le reclama el FMI y el mercado financiero para avanzar en la reformulación económica del país.
De allí que la definición de Francos resultó relevante porque expuso la aspiración del gobierno y cualquier porcentaje por debajo del 40% será leído como que no alcanzó las expectativas.
En declaraciones en la señal de noticias DNEWS, Francos se mostró confiado en el apoyo de la sociedad.
Las elecciones legislativas renovarán 127 de las 257 bancas de la Cámara de Diputados, para el período 2025–2029; y 24 de las 72 bancas del Senado, correspondientes a 8 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, para el período 2025–2031.
Francos admitió que las elecciones en el territorio bonaerense podrían ser un poco más difíciles para el oficialismo nacional: “Tal vez en la provincia de Buenos Aires sea una elección más peleada porque el justicialismo tiene muchas intendencias, pero yo creo que la gente está harta también”.
Francos dijo que La Libertad Avanza ha gobernado desde diciembre de 2023 hasta la actualidad con minoría en ambas cámaras del Congreso, lo que le impidió “hacer muchos cambios”, dado que no contaba con los votos necesarios para sancionar leyes, por lo que espera que las próximas legislativas cambien esa configuración de fuerzas.
El funcionario también dio cuenta que el Gobierno está mirando lo que podría pasar en La Matanza, el distrito más densamente poblado de la Argentina y que tiene un rol clave en el resultado general de las elecciones en la provincia de Buenos Aires.
“Cuando uno ve algunas encuestas de la provincia o de La Matanza, se ve que la gente rechaza al justicialismo en cantidades, en volúmenes de votos muy altos”, comentó Francos.
Ante la consulta sobre si ya conversó con Milei sobre quiénes serán los reemplazos de Bullrich y Petri en el Gabinete nacional en caso de que ambos accedan al Congreso, Francos comentó: “No, a ver, yo no se lo he preguntado aún al presidente. Falta bastante, ¿no? En diciembre recién se producirá el cambio”.
“Yo supongo que el Presidente lo debe estar meditando, debe tener algún nombre, porque, yo creo, que va a depender mucho de cómo se conformen los cuerpos legislativos, cuáles sean las figuras que el Presidente quiere o necesita para poder llevar adelante las reformas en el Parlamento”, dijo el jefe de Gabinete.
Francos también se sumó a la discusión del momento por la película “Homo Argentum” que protagoniza, Guillermo Francella.
El actor había cuestionado recientemente que algunas producciones cinematográficas argentinas son “muy premiadas” pese a que “le dan la espalda al público”, que “no representan a nadie” y que son vistas por “cuatro personas y la familia del director”.
Esas declaraciones desataron la respuesta de Pablo Echarri, actor y productor que defendió la diversidad del cine argentino y el apoyo estatal a la cultura a través del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), un organismo que el Gobierno ha intentado cerrar.
Francos criticó a Echarri: “La verdad que cuando uno lo escucha a Echarri, yo me pregunto:¿quién se cree Echarri?¿Dueño de qué, dueño de la verdad cultural de la Argentina? Porque lo que él califica es como que algunos, como ellos, son democráticos y el resto no lo son. Es como una especie de cancelación de la oposición a sus ideas. Yo creo que esa etapa ya está superada en la Argentina”.