Con la resolución general N° 44 del Ente Regulador de los Servicios Públicos (Ersep), el organismo de control de los servicios públicos aprobó un incremento del 12,3% en el coeficiente regulatorio (CR) que se aplica a la tarifa que cobra Aguas Cordobesas.
El aumento, que rige desde la publicación de la norma en el Boletín Oficial el viernes pasado, corresponde a las variaciones de costos que la empresa del Grupo Roggio calculó para los meses de enero y febrero de este año.
El incremento es el segundo del año, ya que desde noviembre comenzó a regir una variación del 19,1%. En ese caso, se trató de las variaciones de costos de los meses de septiembre, octubre, noviembre y diciembre de 2024.
Un dato importante, y que fue denunciado por dos de los vocales que votaron en contra de ambas subas en el directorio del Ersep –Facundo Cortés (UCR) y Rodrigo Vega (Frente Cívico)–, es que una porción relevante del incremento en lo que va del año se debe a un fuerte ajuste tributario aplicado por la Provincia.
Así es, a través de la Administración Provincial de Recursos Hídricos (APRHI), el Gobierno de Martín Llaryora aplicó, según los vocales, fuertes incrementos de los cánones por “derecho de uso” y de “agua cruda”. Esos cargos, por contrato, se trasladan directamente a la boleta.
Según el informe de variación de precios que la empresa presentó en la audiencia pública de febrero como parte del proceso de ajuste de ese mes, el impacto en la tarifa de las resoluciones generales 2 y 3 del APRHI fue del 2,75%. Ese mes, el cálculo a la empresa le daba pedir un 16,26% por la suba de sus costos, pero pidió un 19,46% (y se aplicó un 19,1%) debido a la suba del costo del agua cruda en la ecuación.
Aumentos impositivos
En la redacción de su voto negativo, Vega dijo que “el significativo incremento en la tarifa del servicio de agua responde, en buena medida, a los aumentos impositivos impulsados por el Gobierno Provincial, los cuales se reflejan en este caso, a través de los incrementos en los cánones establecidos por la APRHI. este tipo de medidas representa una carga económica adicional considerable para los usuarios, particularmente en un contexto de alta inflación y deterioro del poder adquisitivo”.
“Mi voto es negativo respecto de la aprobación del aumento tarifario propuesto (...) priorizando las necesidades de los usuarios, quienes dependen del acceso posible y garantizado a un servicio tan básico como el agua”, agregó Vega.
El radical Cortés, por su parte, argumentó su voto negativo en que “la tarifa del servicio de agua potable a cargo de la prestataria ha tenido ajustes que en todos los supuestos superan los índices inflacionarios (...) el ajuste de la tarifa desde la mesa tarifaria Nº 41 de 2024 a la mesa tarifaria Nº 48 que ahora tratamos, arroja un acumulado de 131,9% interanual. Este valor es notablemente superior al 55,9% registrado por el Indec durante el mismo período”.
“En virtud de lo expresado, (...) la autorización de la tarifa no puede prosperar, por lo menos en los términos que ha sido propuesta por la mesa tarifaria, pues estaríamos profundizando un injusto desequilibrio entre las partes”, agregó.
Además de Vega y de Cortés, votó en negativo el representante de los usuarios, Mario Raúl Peralta.
De esta forma, el aumento fue aprobado por mayoría, con el voto doble del presidente del cuerpo, José Luis Scarlatto, y las aprobaciones de los vocales del peronismo Mariana Caserio y Walter Scavino.
Respecto del aumento de los cánones, cuando se dio a conocer el inicio del proceso de incremento aplicado ahora, Cortés, en diálogo con Radio Continental, dijo que casi la mitad del ajuste de debe al incremento del valor que la Provincia le cobra a la empresa por la extracción y distribución del agua, algo que la concesionaria traslada directamente a los usuarios. “Es un mecanismo de recaudación indirecto: la Provincia recibe más fondos a través de la tarifa, pero quien termina pagando es la gente. Por lo tanto, el Estado provincial recauda más sin mostrarse como responsable del incremento”, dijo.
En su voto, Peralta argumentó: “Desde la aplicación del DNU 70/2023 del Poder Ejecutivo nacional (...) se evidencia su perversidad e infamia, es por ello que no puedo acompañar y mi voto es negativo”. Y agregó: “Hoy muchos trabajadores de se encuentran bajo línea de pobreza (...), el universo de los usuarios en general sufrimos la presión constante de aumentos de todo tipo y ni hablar de los jubilados y enfermos crónicos que se los toma como variable de ajuste”.
