Desde el periódico Financial Times publicaron este lunes un extenso artículo donde analizan la crisis económica argentina en un contexto de alta inflación y subida en los tipos de cambio paralelos. Allí advierten que “la confianza en la economía argentina se está evaporando mientras el gobierno lucha contra las internas políticas, un montón de deuda interna cada vez mayor y una inflación que se precipita hacia el 90%”.
El informe expresa que la brecha cambiaria en el país llegó a un nivel que “no se veía desde la hiperinflación de 1989-1990. El presidente Alberto Fernández ha descartado la posibilidad de una devaluación. Sin embargo, muchos argentinos y economistas de bancos temen que las cosas empeoren bastante antes de mejorar”.
“El dólar estadounidense se ha disparado a nuevos máximos en el mercado negro, ya que los argentinos limitados a comprar 200 dólares al mes se apresuran a acudir a los cambistas para deshacerse de sus pesos, que se están devaluando rápidamente. El viernes, los dólares se vendían en las calles de Buenos Aires a 337 pesos, un 15% más en sólo una semana”, apuntaron desde el FT.
El diario británico enumera los asuntos más graves de la economía argentina: la inflación, que con los índices actuales podría llegar al 90%; las reservas en el BCRA, que oscilan alrededor de los 2.400 millones de dólares, y el desplome en la cotización de los bonos de canje de deuda.
Sobre la nueva ministra de Economía, Silvina Batakis, afirman que se trata de “una figura poco conocida a la que pocos creen que tenga el peso político necesario para lograr los recortes en las subvenciones energéticas y la reducción de la impresión monetaria que eludió su antecesor”, Martín Guzmán. No obstante, reconoce que el FMI la recibió en buenos términos.
Respecto al acuerdo con el organismo internacional, dicen que “si bien la Argentina se limitó a emitir $ 765.000 millones al año para financiar su déficit, el Banco Central ya lleva impresos $ 630.000 millones”. En ese marco, parece difícil cumplir la reducción del déficit fiscal y continuar con la política de subsidios energéticos.
“Encima de una economía que se deteriora, está la conflictiva política argentina de cara a las elecciones presidenciales del año que viene, que los peronistas probablemente pierdan”, señalaron. Los argentinos, entonces, “recurren al dólar blue a medida que la crisis empeora”.
“El rápido deterioro de la confianza y las crecientes dificultades del Gobierno para financiarse hacen temer una crisis económica total, similar a las que han asolado periódicamente al exportador de cereales sudamericano en el último medio siglo”, advierten.
Además, recordaron que “Argentina ha estado en gran medida aislada de los mercados de deuda internacionales” desde el default de 2020. En esa situación, “el Gobierno se está financiando a sí mismo mediante la impresión de dinero y la deuda interna”, atada a la inflación y con tasas cada vez más altas.
Adán, un arbolito de 28 años, dijo al periódico británico que “la venta de dólares está más loca que nunca. Lo único que los clientes no quieren tener son los pesos... muchos se preguntan qué pasará después”.
Por último, desde el FT advierten que “ninguna medida será efectiva hasta que quede claro que la vicepresidenta Cristina y su grupo no sabotearán a Batakis”.
