La tasa de desocupación ascendió en el país a 7,1% al cierre del tercer trimestre de este año, equivalente a 1.500.000 personas.
A su vez la subocupación –personas que trabajan menos de 36 horas semanales- se ubicó en 11%, que representa cerca de 2.400.000 personas.
Las cifras surgen de datos que difundió este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
En tanto, en Córdoba la desocupación fue de 7,2%, levemente por encima del total país, pero con una sensible baja frente al 8,7% del segundo trimestre de este año y al 11.4% que se había registrado en el mismo período del año pasado.
De esta forma el escenario laboral provincial se alineó con el nacional luego de varios períodos con márgenes desfavorables.
En la provincia mediterránea la subocupación fue de 15%, con un descenso de 2,2 puntos contra el 17,2% del período anterior y de 2 puntos con relación al 17% de un año atrás.
En Córdoba también resaltó el alza de la tasa de empleo, que surge de la relación entre los ocupados y la Población Económicamente Activa (PEA), y que se ubicó en 45,8%, contra el 45% del segundo trimestre y el 44,5% que se observó en el mismo período de 2021.
Desempleo en Córdoba y en Argentina
La cantidad de personas sin trabajo en el total del país surge de extrapolar la tasa de desocupación general contra una PEA de alrededor de 22 millones de personas.
El 7,1% de desocupación nacional computado al 30 de septiembre resulta 0,2 puntos superior a la informada por INDEC al cierre del segundo trimestre, pero 1,1 puntos por debajo de la detectada un año atrás.
Este comportamiento responde a una mejora general en la economía, pero que se desaceleró desde el inicio del segundo semestre con impacto directo en el empleo.
Según las proyecciones económicas, en 2022 la economía crecerá por encima de 5%, lo cual explica las mejoras interanuales en el empleo, pero desde junio los datos de actividad muestran una desaceleración que comienzan a tener consecuencias sobre el mercado laboral.
El informe del INDEC indicó que, sobre la población urbana relevada (aproximadamente un universo de 29.2 millones de personas), el 72,5% son asalariados (9,4 millones). Entre abril y junio de este año ese porcentaje había sido de 73,5% (9,6 millones).
En consecuencia, de julio a agosto la tasa de desempleo subió 0,2%, pero 200 mil trabajadores han mutado a empleos vinculados al cuentapropismo, que no en todos los casos significan avances en la calidad de obtención de sus recursos mensuales.
Del total de 9,4 millones de asalariados, 5,9 millones están inscriptos formalmente –”en blanco”-, mientras que 3,5 millones trabajan “en negro”, que significa un 37,5% del total. En este caso se produjo una mejora ya que en el segundo trimestre los trabajadores no registrados eran 3,6 millones.
Otro dato que surge del informe del INDEC es que el 16% de los ocupados está buscando otra opción laboral. Este porcentaje disminuyó contra el 16,3% del segundo trimestre y el 16,5% de igual período del año pasado.
Dentro del 11% de subocupación que se registró en el total del país, un 7,6% está en la búsqueda activa de un trabajo, mientras que el 3,4% no lo está haciendo.
La peor configuración laboral se encuentra en los partidos del Gran Buenos Aires donde la tasa de desempleo subió a 9,1% desde el 8,5% que se había detectado en el período anterior. No obstante, comparado con el tercer trimestre de 2021 se verifica una baja de 0,4 puntos (9,5%).
Una situación similar se observa en Bahía Blanca, donde el 9% está desempleado, mostrando un alza significativa con relación al 6,7% del período abril/junio.
En contrapartida, el conglomerado Viedma-Carmen de Patagones registra el mejor escenario laboral con una tasa de desocupación de apenas 0,9%, el único por debajo de un punto.
Según el relevamiento oficial, Comodoro Rivadavia/Rada Tilly tienen un desempleo equivalente a 1,4% y en Santiago del Estero/La Banda es de 1,6%.
