Una asamblea gremial se llevó a cabo este miércoles por los trabajadores de Intercargo y provocó importantes demoras y cancelaciones en los aeropuertos de Aeroparque y Ezeiza, afectando a miles de pasajeros.
La medida de fuerza, que comenzó alrededor de las 11 de la mañana, se desató a raíz del despido de un trabajador en el aeropuerto metropolitano, y se extendió rápidamente a Ezeiza, lo que impactó de manera directa en el flujo de vuelos y en los servicios de rampa, esenciales para el despacho de valijas y la bajada de pasajeros.
Impacto en los vuelos y pasajeros afectados
La situación generó caos en varios vuelos, especialmente en Aeroparque, donde los trabajadores de Intercargo decidieron no despachar equipajes en los vuelos de salida y retrasaron la descarga de pasajeros en los arribos. La Asociación del Personal Aeronáutico (APA) expresó su enojo por el despido y denunció que la medida era “arbitraria e ilegítima”. En un comunicado, el gremio señaló que no permitirían “provocaciones” en un contexto de paritaria interrumpida, acusando al presidente de Intercargo, Fernando Montes, y a sus gerentes de actuar irresponsablemente.
Uno de los vuelos afectados fue el de Latam que llegó desde San Pablo a las 12 del mediodía con 149 pasajeros a bordo. Según las fuentes, el personal de Intercargo no permitió que los pasajeros descendieran del avión, lo que generó que continuaran durante varias horas en la aeronave.
Por otro lado, la aerolínea Flybondi también reportó consecuencias graves de la medida gremial. En total, la compañía debió cancelar 8 vuelos, lo que afectó a más de 1.340 pasajeros, mientras que otros 649 vieron demorado su viaje. Además, más de 400 personas, entre pasajeros y tripulaciones, se vieron “retenidas” durante más de dos horas dentro de sus aeronaves, sin poder descender. “Es inadmisible que un sindicato pueda ejercer la privación de libertad de las personas, obligándolas a permanecer a bordo de las aeronaves por la fuerza”, expresó la compañía en un comunicado.
Aerolíneas Argentinas y la crisis sindical
La medida gremial también golpeó a Aerolíneas Argentinas, que suspendió al menos 15 vuelos de cabotaje previstos para este miércoles, lo que afectó a más de 1.000 pasajeros. El conflicto interno de la aerolínea, relacionado con la renovación de licencias de pilotos, sumó otro capítulo. Este trámite, que incluye prácticas en simuladores de vuelo en el Centro de Formación y Entrenamiento de Pilotos (Cefepra) en Ezeiza, se vio interrumpido por protestas de los últimos meses, lo que generó una falta de personal habilitado para operar vuelos tanto internacionales como de cabotaje.
Como consecuencia, Aerolíneas se vio obligada a cancelar algunos vuelos y a reducir su capacidad operativa, sustituyendo aviones de largo alcance por modelos más pequeños. Por ejemplo, la ruta a Miami, que normalmente se cubre con un Airbus A330, ahora se realiza con un Boeing 737 MAX, que no solo tiene menor capacidad de pasajeros, sino que también requiere realizar escalas para reabastecer combustible debido a su menor autonomía.
Los vuelos afectados incluyen rutas de Aeroparque a destinos como Jujuy, Ushuaia, Mendoza, Tucumán, Santiago del Estero y Rosario, entre otros. La falta de renovación de licencias de los pilotos de largo alcance, que se actualizan cada seis meses, generó una crisis operativa sin precedentes para la aerolínea de bandera.
Cuál es la situación en Córdoba
El Aeropuerto Internacional Ingeniero Aeronáutico Ambrosio Taravella registró varias cancelaciones y demoras en sus vuelos, afectando tanto arribos como partidas de diferentes aerolíneas, lo que generó contratiempos para los pasajeros por la repentina medida de fuerza.
Según el sitio oficial de Aeropuertos Argentina, hasta las 16 de este miércoles había cuatro vuelos afectados, dos partidas y dos arribos de la empresa Flybondi con destinos a Aeroparque y a Mendoza.
Luego de esa actualización, entre las cancelaciones confirmadas figuran tres arribos y tres partidas. El vuelo de Flybondi desde Mendoza, programado para arribar a las 18:30, fue cancelado. A este se sumaron dos vuelos de JetSmart que llegaban desde Aeroparque, uno a las 21:27 y otro a las 22:33.
Las partidas también se vieron afectadas: el vuelo de Flybondi con destino a Aeroparque que debía partir a las 19:05 fue cancelado, al igual que dos partidas de JetSmart con el mismo destino, previstas para las 22:00 y las 23:06, respectivamente.
En tanto, algunos vuelos de arribo se encuentran actualmente sin información de estado, generando incertidumbre para los pasajeros. Entre ellos, se destacan tres vuelos de Aerolíneas Argentinas desde Aeroparque, con horarios de llegada a las 20:20 y 21:00, y un vuelo de Flybondi desde Neuquén programado para las 22:00. La falta de actualización en el estado de estos vuelos causa preocupación en los viajeros y sus familiares.
Por su parte, la única partida reportada como demorada corresponde a Aerolíneas Argentinas con destino a Ezeiza. El vuelo, que debía despegar a las 19:50, sufrió una demora cuya duración aún no se especificó.
Pese a las cancelaciones y demoras, varios vuelos lograron cumplir sus horarios previstos. Aerolíneas Argentinas se mantiene en horario de dos partidas hacia Aeroparque, con salidas programadas para las 21:10 y 21:50. Por su parte, Flybondi confirmó su vuelo hacia Ezeiza a las 22:35, sin alteraciones.
La situación actual en el Aeropuerto Internacional de Córdoba, marcada por las interrupciones y falta de información en varios vuelos, responde a las sorpresivas medidas de fuerza, por lo que se recomienda a todos los pasajeros verificar sus vuelos antes de dirigirse al aeropuerto.
Podés consultar todos los vuelos de Córdoba acá.
Un plan de contingencia del gobierno
El impacto de estas protestas llegó a la esfera política, y desde la Secretaría de Transporte del Gobierno nacional se iniciaron reuniones con aerolíneas privadas para implementar un plan de contingencia. Aunque los nombres de las aerolíneas involucradas no fueron revelados, fuentes cercanas al Ministerio informaron que el Gobierno busca ampliar la capacidad operativa de otras líneas aéreas en caso de que los paros y las medidas de fuerza continúen afectando a Aerolíneas Argentinas.
El objetivo es garantizar la conectividad aérea en el país y asegurar la continuidad de las operaciones, incluso cuando las protestas interrumpen los servicios. De hecho, se flexibilizó la normativa que antes favorecía a Aerolíneas, permitiendo ahora que otras empresas aéreas operen más rutas sin la necesidad de tener aeronaves con matrícula o tripulación argentina.
