El resultado de este domingo generará festejos y decepción entre los distintos espacios cordobeses. Los fríos números determinarán el reparto de las nueve bancas en Diputados y las tres en el Senado. Aunque también quedará material para el análisis y las especulaciones políticas en el escenario local, de cara al lejano 2023.
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Se trata de una elección legislativa nacional, pero que seguramente tendrá influencia en el armado electoral provincial para el futuro inmediato, pensando en la disputa por cargos ejecutivos dentro de dos años, que siempre es diferente a los comicios en los cuales se eligen legisladores.
La campaña cordobesa tuvo la particularidad del fuerte protagonismo de Juan Schiaretti. El gobernador se movió como el principal candidato del oficialismo, pese a que su nombre no figura en ninguna de las dos boletas de Hacemos por Córdoba.
En la alianza Juntos por el Cambio tuvo una campaña liderada por dos dirigentes, Luis Juez y el radical Rodrigo De Loredo, candidatos a senador y a diputado respectivamente. El resultado de hoy los puede dejar posicionados como los principales referentes opositores locales.
Mientras que en el Frente de Todos, el único espacio que responde al Gobierno nacional en Córdoba, puede quedar atravesado por la incertidumbre mirando al futuro, si la cosecha de votos no es la esperada.
En los hechos, el resultado de las Paso terminó con la discusión por las tres bancas en el Senado. Juntos por el Cambio se quedará con dos (Juez y Carmen Álvarez Rivero) y una para el schiarettismo (Alejandra Vigo).
En la campaña para las primarias hubo cruces entre schiarettistas y el Frente de Todos, teniendo en cuenta que el senador Carlos Caserio busca la reelección por el espacio que responde a la Casa Rosada, cuando hasta octubre de 2019 fue titular del PJ.
Los casi 14 puntos que Hacemos por Córdoba le sacó a la lista frentista definió esa disputa. La esposa del gobernador seguramente reemplazará a Caserio en el Senado, a partir del 10 de diciembre.
Sobre la distribución de bancas para la Cámara Baja hay algunas incógnitas ¿Juntos por el Cambio se quedará con seis escaños? ¿El schiarettismo retendrá los tres que pone en juego? ¿El Frente de Todos mantendrá un lugar en Diputados? Habrá que esperar el veredicto de las urnas.
Futuro inmediato
Más allá de que se trata de una contienda legislativa nacional, cuando se conozcan los números oficiales es probable que haya indicios concretos sobre lo que se viene en la política cordobesa.
Algunos de esos indicios puede que se reflejen en los discursos de los protagonistas, sobre todo, de los ganadores.
Schiaretti no tiene reelección y su estrategia para el futuro inmediato apunta a mantener el poder en el PJ local, hasta el final de su mandato. Su posible proyección nacional tiene como objetivo -precisamente- sostenerse como el máximo referente del oficialismo provincial.
El intendente Martín Llaryora -el más firme aspirante a suceder al gobernador por el PJ- se metió de lleno en la campaña en los últimos 10 días, tiene expectativas de que el oficialismo mejore su promedio de votos en la Capital.
No obstante, la mayor atención estará centrada esta noche en el búnker de Juntos por el Cambio. Juez y De Loredo han admitido que están “consensuando” sus mensajes para no adelantar los tiempos de la carrera por las candidaturas provinciales.
¿Lo lograrán? Es otra de las incógnitas que se develarán esta noche, además del resultado y del reparto de las bancas.
