Atepsa, el gremio que representa a los controladores aéreos, mantiene las restricciones sobre los vuelos de carga y advirtió que podría extender el plan de lucha si la Empresa Argentina de Navegación Aérea (Eana) no cumple con los acuerdos pendientes. La definición sobre la profundización de las medidas de fuerza se dará en un plenario convocado para este martes.
La discusión se produce en un contexto sensible, dado que la próxima semana habrá un fin de semana largo, y el sindicato no descarta ampliar el alcance de las acciones sindicales.
Incumplimientos y denuncia de inacción empresarial
El sindicato denunció que la empresa estatal Eana “continúa incumpliendo los compromisos asumidos”. Atepsa sostiene que, tras meses de diálogo y responsabilidad buscando soluciones que eviten afectar las operaciones de pasajeros, “el silencio de Eana agrava la situación”.
El conflicto se remonta a las paritarias firmadas hace más de dos meses. Según el gremio, el incumplimiento de los acuerdos derivó en una escalada de protestas. Los reclamos apuntan específicamente a la demora en la aplicación de cláusulas vinculadas a la carrera profesional, condiciones de servicio y actualización de funciones, afectando directamente el salario, las condiciones laborales y la estabilidad del personal operativo.
Si bien el Ministerio de Trabajo había dictado la conciliación obligatoria en agosto, la falta de avances reactivó el reclamo durante noviembre. Atepsa advirtió que, si no logran el diálogo, se verán obligados a incrementar las medidas legítimas de acción sindical.
Por su parte, Eana sostiene que el convenio paritario se encuentra vigente hasta diciembre y asegura que no existen atrasos salariales.
El impacto actual y la amenaza de escalada
Actualmente, las medidas de fuerza se concentran únicamente en la aviación de carga en turnos nocturnos, específicamente entre las 22 y las 6.
El cronograma de paros difundido por Atepsa incluye jornadas de protesta los días 14, 18, 21, 24, 27 y 30 de noviembre. Durante esas horas, no se autorizan despegues de aeronaves destinadas exclusivamente al transporte de carga ni se reciben sus planes de vuelo. Se exceptúan las operaciones esenciales, como servicios humanitarios, sanitarios, de Estado o de búsqueda y salvamento.
Estas medidas ya están impactando la logística de productos agrícolas, industriales y farmacéuticos a través de los principales aeropuertos del país.
El plenario del martes podría definir un endurecimiento del plan de lucha justo antes del fin de semana largo de mediados de mes, cuando se anticipa un aumento del movimiento aéreo. Aunque las restricciones vigentes no afectan vuelos de pasajeros, una ampliación del conflicto podría repercutir en la planificación de operaciones comerciales y en la coordinación de vuelos internacionales.
El conflicto entre Atepsa y Eana actúa como una presión atmosférica que se acumula en el sistema aeroportuario: inicialmente sólo genera turbulencias leves en el transporte de carga, pero si el plenario no logra disiparla, la tormenta podría extenderse a los vuelos de pasajeros, poniendo en riesgo la estabilidad del tráfico aéreo nacional justo cuando más viajeros se preparan para despegar.
























