La apreciación del peso durante 2024 generó un cambio en el flujo turístico y, mientras los viajeros que llegaron al país cayeron 19,2% durante noviembre, la cantidad de argentinos que cruzaron la frontera aumentó 43,2%.
El destino más elegido fue Chile, a partir de un incremento de los “tours” de compra a causa de la diferencia cambiaria.
Estos datos se desprenden del informe “Estadísticas Internacional de Turismo” que elabora el Indec y difunde mensualmente.
A dónde eligieron viajar los argentinos y para qué
La cantidad de argentinos que viajaron a Chile el mes pasado aumentó 141,5% en forma interanual, mientras que a Paraguay crecieron 74,7%. Dado que la categoría “excursionistas” (en el volumen general) se duplicó, se puede inferir que la gran mayoría fueron cruces en el mismo día para hacer compras (se define “excursionista” a quien sale o entra del país pero no pernocta ni una noche).
Con relación a Brasil se verificó durante noviembre un aumento de viajantes argentinos de 19,4%. En tanto, a Estados Unidos volaron 12,5% más de argentinos que en noviembre de 2023.
La tendencia de noviembre reforzó los números de octubre, y muestra que los compatriotas están dispuestos a gastar las divisas fueron de las fronteras donde aumentan su poder adquisitivo.
En sentido inverso, al “encarecerse” el país la cantidad de visitantes que arribó cayó 29,2%. Hubo una disminución de 19,2% en turistas directos y un 40,2% de “excursionistas”, lo cual da cuenta también que ante el fortalecimiento del peso dejó de resultar atractivo para los habitantes de países vecinos cruzarse a realizar compras.
En el volumen total, según el Indec viajaron fuera del país 1.680.100 argentinos y llegaron 855 mil extranjeros.
Del total de viajantes locales casi uno de cada cuatro fue a Chile (explica el aumento total de 141,5%) y cerca del 20% eligió Brasil. En tanto, un 13,2% lo hizo a Paraguay y 12,7% a Uruguay. Se espera que durante el período estival Brasil pase al frente de este listado.
De los 505.100 visitantes el 20,8% lo hizo desde Brasil, el 17,4% desde Europa, un 14,9% desde Chile y 12% desde Uruguay entre los orígenes más relevantes.
Comparación con Brasil
Mientras en redes sociales e informes periodísticos aparece la diferencia de precios entre Argentina y Brasil de cara al próximo verano, el economista Alberto Cavallo realizó un informe en el que precisó que una canasta básica de alimentos y productos básicos es 19% más cara en nuestro país. El conjunto que estudio el economista incluye alimentos, combustibles y electrónicos.
La diferencia de precios entre la Argentina y Brasil se agudizó en las últimas semanas por la apreciación del peso y la devaluación del real.
El peso cotiza en la franja de $ 1.150/1.200 en sus distintas versiones, mientras que el real se acercó este lunes a los R$ 6,2 por dólar.
El dólar, tras la eliminación del impuesto Pais
En la rueda de este lunes el “blue” volvió a cotizar en $ 1.200 en Buenos Aires, y en $ 1.212 en Córdoba, $ 40 por encima del viernes.
En tanto, el MEP quedó en $ 1.150, mientras que el Contado con Liquidación se ubicó en $ 1.168.
Por su parte, en el primer día de eliminación del impuesto Pais, el dólar a pagar para consumos de bienes y servicios en el exterior culminó a un precio de $ 1.362.
El Gobierno confía en que la brecha de más de $ 200 que se mantiene entre el MEP y el “dólar tarjeta” hará que los argentinos que salgan al exterior continúen usando sus dólares en cuenta y de esta forma al no utilizar el circuito oficial el gasto no impactará en la salida de reservas.
El Banco Central vendió hoy U$S 179 millones, pero de todas formas en el mes el saldo es positivo en U$S 1.496 millones.
Dólar “cara chica”
En otro orden, el Banco Central de la República Argentina dispuso que los bancos podrán recibir los “dólares cara chica” hasta el 31 de marzo, pero aclaró que la decisión de aceptarlos queda a criterio de cada entidad financiera.
Si bien la autoridad monetaria había inducido a que durante el blanqueo se tomen estos billetes, los bancos mostraron reticencia a aceptarlos y buscaban diferentes excusas para no recibirlos.
En rigor, los billetes tienen el mismo valor y la decisión de tomarlos con un valor diferenciado surgió de algunas casas de cambio y luego se extendió.
