Los principales bancos del sistema financiero aumentaron la tasa de plazo fijo que pagan a sus ahorristas para tentarlos a que no se pasen al dólar y no perder depósitos en pesos.
El movimiento que se viene observando en los últimos días se potenció este miércoles con un incremento a 37% nominal anual de los rendimientos por depósitos de 30 a 59 días por parte del Banco Nación.
Fue un avance de casi tres puntos porcentuales con relación al martes que colocó a la institución como la que mejor tasa les ofrece a sus clientes.
Esta decisión de la institución oficial puede forzar a que las demás entidades sigan un camino similar para mantenerse competitivos.
El aumento responde al objetivo de contener pesos en sus cuentas, en momentos en que por disposiciones de Banco Central habrá una caída en la oferta por suba de encajes. Al mismo tiempo, una tasa más atractiva ayuda a contener la escalada de la divisa, en momentos en que los ahorristas pueden adelantar la decisión de dolarizar sus tenencias ante la incertidumbre electoral.
Según información suministrada por el Banco Central, la brecha de tasa es de hasta 8 puntos porcentuales entre los nueve bancos de mayor volumen de depósito a plazo fijo del sistema. De ese conjunto, con el ajuste de este miércoles el Banco Nación queda al frente ofreciendo 37%, que significa un rendimiento mensual de 3%. En la parte baja de la tabla queda el Banco Ciudad con 29%. En medio aparecen: Galicia, 35,25%; BBVA y Credicoop 35%; ICBC, 34,6; Macro, 33,5%; Santander, 33% y Bapro 32%. Por su parte, Bancor ofrece 36%. Del resto de las entidades financieras, se destaca el Banco Meridian que paga a sus ahorristas hasta 38% mensual.
Desde el punto de vista de los depositantes, aquellas colocaciones a entre 35 y 38% de tasa nominal anual representan una tasa efectiva mensual de 3% o levemente inferior. En caso de que el traslado a precios de la última suba del dólar sea acotado y se cumplan las proyecciones de inflación del orden de 2%, la operación dejaría una tasa real positiva cercana a un punto. Así se regeneraría un escenario de carry trade.
No obstante, cabe apuntar que este escenario puede ser circunstancial hasta tanto termine de normalizarse el mercado de pesos tras la salida de las Lefi.
En lo inmediato colaboró en frenar la suba del dólar y apuntaló su descenso. La baja de esta semana también responde a una mayor liquidación del campo luego de la baja de retenciones.
De acuerdo a datos de PPI el viernes 1º se volcaron US$ 80 millones, U$S 106 millones el lunes y U$S 101 millones el martes contra US$ 44 millones en los cinco días previos.
De allí que el dólar mayorista tuvo una baja de $ 42 en lo que va de agosto para cerrar este miércoles en $ 1.323 y $ 1.332.
“La rueda mostró un comportamiento más calmo, con un mercado que abrió levemente por debajo del cierre previo. En el tramo final de la jornada, la presión vendedora lo llevó hasta un mínimo de $1.330, desde donde rebotó para cerrar finalmente en $1.332”, graficaron desde ABC Mercados. Con este escenario, el precio en el Banco Nación acompañó con un leve descenso a $1.345.
En el resto de los bancos del sistema, la cotización quedó en $ 1.310 y 1.350 para ambas puntas, precio al que acceden los minoristas y base sobre la cual deberán realizar su apuesta a “tasa o dólar”. En el caso de los financieros, el el MEP finalizó en $ 1.337 y el CCL en $ 1.338.
Por su parte, el “blue” declinó a $ 1.300 y 1.320. El precio en Córdoba de este mercado fue de $ 1.334.
La relajación también se observó en los mercados de futuro, donde el contrato a fin de agosto bajo $ 4,6 a $ 1.360.
Hoy el Banco Central publica el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que este mes adquiere una mayor relevancia, dado que refleja la opinión de los principales analistas sobre el impacto que tendrá en la última parte del año, el cambio de condiciones macroeconómicas.
La evaluación capta el salto del dólar, la volatilidad de las tasas y parcialmente las nuevas metas sobre acumulación de reservas que acordó el gobierno con el FMI.