El cimbrón político que generó en la gestión capitalina del intendente Martín Llaryora el fallido recital del cuartetero Ulises Bueno dejó heridos y algunos que –por lo bajo– no mostraron nada de empatía por el traspié político, que le pegó de lleno al secretario de Gobierno y precandidato a intendente Miguel Siciliano. De este depende la Dirección de Turismo, a cargo de Pablo Bianco, que organizó el frustrado evento.
Siciliano compite por la sucesión de Llaryora con el viceintendente Daniel Passerini; con el secretario de Transporte del municipio, Marcelo Rodio, y con el legislador provincial Juan Manuel Cid.
En los entornos de estos dirigentes no hubo festejo, pero estuvieron lejos de mostrar pesadumbre por un hecho que también le traerá costos políticos al intendente.
En otras líneas internas del peronismo pasó algo similar. Por ejemplo, los funcionarios que responden a Alejandra Vigo tampoco mostraron preocupación por el hecho. Es que, en la práctica, casi no tienen sintonía con Siciliano.
En el Centro Cívico, en tanto, la polémica también tuvo eco dispar. Integrantes de algunas áreas que se sienten poco escuchadas por el intendente tampoco se preocuparon por el impacto de la controversia por el fallido lanzamiento de la temporada de invierno en la Capital.
“Tal vez ahora al intendente le hagan falta consejos para la comunicación”, se escuchó decir en el Panal.
La controversia sobre el escándalo que generó la asignación de los 43 millones de pesos a una productora apuntada por Ulises Bueno tuvo otro dato particular.
En la noche del jueves, cuando el show aún estaba en pie, desde el Suoem le comunicaron a Siciliano que ningún inspector de tránsito iba a cumplir tareas en el parque Sarmiento, lugar del espectáculo. Los organizadores habían pedido 35 agentes municipales para controlar y ordenar el tránsito, pero el gremio que los agrupa rechazó prestar ese servicio.
En el municipio se abrió una caza de brujas sobre los responsables de filtrar las fotos con la carta enviada por Bueno a las autoridades, donde se ofreció a trabajar “gratis”, pero a cambio de 43 millones para los gastos de organización del evento.
Señal del albertismo, en medio de la polémica con los piqueteros
En el Boletín Oficial del viernes pasado apareció una designación en el Gobierno nacional que no es una más y que tiene como trasfondo político la dura pulseada entre Cristina Fernández y Alberto Fernández por el control de las organizaciones piqueteras.
El dirigente cordobés Néstor Moccia, quien hasta el día anterior era asesor, fue designado director de Asuntos Políticos de la Dirección General de Programas de Gobierno de la Presidencia de la Nación.
El cargo es ad honorem, por 180 días hábiles, ya que Moccia tiene desde hace años un cargo como personal efectivo en el Senado nacional.
Más allá de esta cuestión formal, el nombramiento impulsado por el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello, con quien trabaja Moccia, tiene el objetivo político de consolidar su relación con las organizaciones piqueteras.
Moccia trabajó con Oscar Parrilli en las gestiones cristinistas cuando el ahora senador ocupaba el cargo que hoy tiene Vitobello.
El cordobés es uno de los referentes de la organización Somos-Barrios de Pie, que lidera Daniel Menéndez, quien junto al Movimiento Evita son las dos agrupaciones piqueteras que más respaldan al Jefe del Estado.
Moccia también tiene un buen vínculo con la vicepresidenta, con quien se reunió unos meses atrás, al igual que con Máximo Kirchner, y es amigo de Andrés “el Cuervo” Larroque.
El ascenso del dirigente también impactará en el escenario político cordobés, ya que Moccia trabaja con el villamariense Martín Gill, quien la semana pasada fue recibido por el Presidente.
Si bien Gill tiene un buen diálogo con el jefe de Gabinete, Juan Manzur, y con el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, Vitobello y Moccia habrían hecho la gestión para llevar al intendente de Villa María al despacho presidencial.
La libertaria cordobesa detrás de la visita de Milei a Córdoba
El flyer virtual en el que se comunicó la presentación del libertario Javier Milei en Córdoba incluyó la presentación de dirigentes y figuras conocidas, entre ellas la economista Diana Mondino, pero también de nuevos exponentes del mundo libertario en Córdoba.
Entre ellos aparece la abogada laboralista Verónica Sikora, clave en la organización del evento que se realizó el sábado en Studio Theater.
Sikora es una profesional independiente que se interesó por la mirada política de Milei y comenzó a relacionarse con ese entorno.
Sin lazos partidarios anteriores, la abogada es toda una outsider de la política y tuvo a cargo gran parte del armado, la planificación y la convocatoria de Milei en Córdoba.
La mujer, con presencia ya en los medios de comunicación por su faceta laboral dentro de la abogacía, viene cuestionando públicamente la industria del juicio laboral y la ineficiencia del régimen indemnizatorio de la Ley de Contrato de Trabajo.
“Agenden ese apellido porque no sería raro verla en alguna lista el año que viene”, lanzaron quienes la ayudaron en su “debut” político el pasado fin de semana.
Apoyado en el PRO, Larreta busca acelerar en Córdoba para 2023
El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, comienza a dar señales algo más concretas de estructurar un armado cordobés para respaldar su precandidatura presidencial de 2023.
Aunque tiene trato con dirigentes de los otros partidos que integran la coalición, “el Pelado” eligió dentro de su fuerza, el PRO, a quienes trabajarán en la provincia para apuntalar su proyección.
En ese marco, días atrás, el alcalde porteño designó en Córdoba un trío de coordinadores que se encargará, a lo largo y ancho de la provincia, de la candidatura “Larreta presidente”.
En esta primera instancia, los elegidos son el legislador provincial Darío Capitani, quien además trabaja para competir por la intendencia de Villa María; Gabriel Frizza, exintendente de Jesús María; y Oscar Agost Carreño, vicepresidente del PRO cordobés.
Almuerzo “mano a mano” y gestos cruzados
La agenda de María Eugenia Vidal en Córdoba cumplió el objetivo trazado por la diputada nacional y aspirante a ser parte de alguna fórmula presidencial en 2023. La exgobernadora bonaerense tuvo tres jornadas cargadas de actividades.
Hubo gestos para varios dirigentes e interpretaciones de cada uno de ellos.
Por ejemplo, Vidal tuvo su único almuerzo “mano a mano” de la gira con el diputado nacional Rodrigo de Loredo. Fue el jueves, bien pasado el mediodía, en una conocida parrilla de un centro comercial en barrio Poeta Lugones.
El encuentro fue el único “a solas” que dispuso quien ahora se muestra alineada nuevamente con el expresidente Mauricio Macri.
“Córdoba tiene un potencial productivo enorme. Con Rodrigo de Loredo estamos trabajando desde el Congreso en proyectos que se la hagan más fácil a quienes quieren trabajar, producir y llevar el talento cordobés a todo el mundo”, escribió al instante en Twitter la exgobernadora.
El cordobés correspondió esa publicación con un comentario.
“Para cambiar el rumbo de Argentina se necesita construir equipos comprometidos, con ideas, proyectos nuevos y coraje, y eso es lo que representa María Eugenia. ¡Gracias por visitar Córdoba!”, respondió el radical.
