Ya asumió y comenzó su mandato el nuevo presidente de la república, Javier Milei. Nuestro deseo como comunidad musulmana en Córdoba, como seguramente es el deseo de todos los argentinos, es que al Presidente le vaya bien y a nosotros también.
Usted, señor Presidente, ha solicitado las bendiciones para su futura gestión de un prominente rabino, y eso es bueno, ya que los religiosos tienen una estrecha relación con Dios todopoderoso, quien siempre escucha a todos sus siervos, en especial a las personas de fe muy profunda, firme y certera.
Usted será el presidente de todos los argentinos y no sólo del porcentaje de la ciudadanía que lo votó. Usted será el presidente de ateos, cristianos, judíos, musulmanes y creyentes, quienes practican su fe según sus creencias religiosas garantizadas por la Constitución argentina.
En uno de mis artículos publicados en este diario con el título de “Un ministro de lujo”, hablé sobre el profeta José, hijo de Jacobo (a quien Dios llamó luego Israel, según nos dice nuestro libro sagrado, el Corán). José, quien no era egipcio, fue el superministro de economía del rey Amenhotep III. En su época, su país pasaba por la mayor catástrofe y debacle económicas de todos los tiempos.
Amenhotep convocó a José por su enorme capacidad, sabiduría y, sobre todo, por su humildad, para que diseñara un plan sustentable para enfrentar la crisis que se avecinaba de los siete años de sequía por la cual pasaría Egipto.
A José y a sus colaboradores egipcios les bastaron tres meses para presentar el plan económico con el cual salvarían a Egipto, un plan exitoso que se logró aunando esfuerzos entre las autoridades y la gente.
Argentina necesita de todos sus ciudadanos. Necesita de una acción solidaria, sumada a la humildad y a la transparencia que nos debe caracterizar como personas de buena voluntad.
La comunidad islámica de Córdoba desea el mejor de los éxitos a las nuevas autoridades que tendrán la misión de conducir y sacar adelante al país, porque a la patria todos la queremos; y parafraseando a John Kennedy, no debemos preguntar qué puede hacer la patria por nosotros, más bien preguntémonos qué podemos, como ciudadanos, hacer por ella.
Desde Córdoba, la comunidad islámica le envía al señor presidente Javier Milei las bendiciones para sumarlas a las de las otras confesiones.
* Imam; miembro del Comipaz
