La visita de los All Blacks revolucionó Córdoba, es un equipo símbolo a nivel global que supera los límites del rugby.
Cada detalle cuidado, como que cada jugador se levanta sus propios platos y cubiertos, como la forma que bajan y trasladan el equipaje es una muestra de lo que exhiben y de lo que son.
En la cancha, puedan ganar o no salir campeones, pero son el máximo seleccionado de un deporte.
Más que un equipo exitoso
Nueva Zelanda ha logrado construir una de las sinergias más efectivas entre deporte y proyección internacional.
Los All Blacks, la selección nacional de rugby, no son sólo un equipo exitoso –tres veces campeones del mundo y con un porcentaje histórico de victorias superior al 75%–, sino un ícono cultural y comercial que proyecta valores de la nación entera.

Su imagen está íntimamente asociada a elementos clave de la identidad neozelandesa:
● Excelencia y profesionalismo: constancia en el rendimiento deportivo.
● Disciplina y trabajo en equipo: valores que reflejan la ética de la sociedad.
● Orgullo cultural: el haka maorí antes de cada partido conecta con la herencia indígena y genera un sello único.
● Innovación y resiliencia: adaptación táctica constante y mentalidad ganadora.
Lecciones para nuestro país
El Gobierno y las agencias de promoción de Nueva Zelanda han sabido integrar esta imagen en su estrategia de marca país.
Campañas turísticas, acuerdos comerciales y acciones diplomáticas incorporan a los All Blacks como embajadores globales, posicionando al país como pequeño en tamaño, pero grande en talento y reputación.
Lo que Argentina podría aprender de Nueva Zelanda
Con su rica historia deportiva y cultural, nuestro país podría extraer lecciones de este modelo:
- Unificar mensaje de marca: integrar el deporte, la cultura y la producción nacional bajo un mismo relato. Así como los All Blacks representan disciplina y excelencia, Argentina podría potenciar el fútbol, el hockey o incluso el básquet (Generación Dorada) como símbolos alineados con su identidad nacional.
- Proyección internacional coordinada: los All Blacks son parte activa de la diplomacia pública neozelandesa. Argentina podría utilizar a sus selecciones y atletas como embajadores en ferias, misiones comerciales y campañas turísticas, mostrando una narrativa coherente.
- Valorización de la cultura originaria: El haka no es solo espectáculo, es un puente cultural.
- “Merchandising” y economía creativa: Nueva Zelanda ha monetizado la imagen de los All Blacks globalmente, con licencias y alianzas comerciales que generan ingresos y difunden la marca.
Similitudes interesantes
Dos países del hemisferio sur, productores y exportadores de alimentos.
Tanto Nueva Zelanda como Argentina comparten características estructurales:
● Son países del hemisferio sur con climas y geografías favorables para la producción agroalimentaria.
● Exportan alimentos y materias primas a mercados internacionales altamente competitivos.
● Poseen un fuerte capital cultural y deportivo capaz de generar influencia global más allá de sus productos físicos.
El caso de Nueva Zelanda demuestra que un país productor de alimentos puede ampliar su relevancia internacional si combina su fortaleza exportadora con una marca país potente y consistente, en la que el deporte sea un pilar de proyección.
Argentina, con su diversidad cultural, su potencial productivo y su tradición deportiva, tiene la oportunidad de construir un relato integral que la posicione no sólo como un granero del mundo, sino como una nación creativa, resiliente y admirada, tal como Nueva Zelanda lo ha logrado con los All Blacks.
Nuestro país, necesita darle más valor agregado a sus exportaciones y para ello es indispensable una estrategia afín y mejorar su Marca País. La visita de los All Blacks puede ayudarnos en ese sentido.
Experto en comercio internacional.