Un joven de 20 años, que estaba desaparecido desde hacía 25 días, fue hallado muerto en el interior de la chimenea de una casa a la que supuestamente había intentado entrar para robar.
El cuerpo sin vida de Jonatan Puente fue recuperado el pasado domingo por bomberos de Junín, en el noroeste de la provincia de Buenos Aires, tras ser alertados por los propietarios de la vivienda.
La familia de Puente había denunciado su desaparición a principios de julio y era buscado por la Policía desde entonces.
Fuentes de la investigación declararon al diario Clarín que sospechan que el joven intentó entrar a robar en la finca la misma noche de su desaparición, ya que sabía que sólo era ocupada los fines de semana.
Los dueños de la vivienda descubrieron el cadáver de Puente guiados por el olor nauseabundo que procedía de la chimenea, que tuvieron que romper para poder extraer el cuerpo, en avanzado estado de descomposición.
La ropa permitió a la familia identificar al joven, que murió asfixiado, según reveló la autopsia.
Fuentes del caso señalaron que el fallecido tenía antecedentes delictivos relacionados con robos en propiedades.
