La Agencia Federal Médico Biológica (AFMB) de Rusia, que se ocupa de investigar científicamente si el histórico líder palestino, Yasser Arafat, fue envenenado, informó hoy que necesitará dos o tres meses para comprobar si efectivamente fue así, tal como lo denuncia su viuda.
"Tenemos que establecer un modelo de la llamada primera dosis. Este es un modelo matemático para calcular si la cantidad de sustancia tóxica que fue encontrada en la ropa pudo suponer una dosis letal", declaró Vladimir Uiba, jefe de la AFMB, a la agencia rusa de noticias Interfax.
Uiba aseguró que "sólo a fines de febrero tras estos dos o tres meses se podrá hablar de los primeros resultados y así lo anunciaremos", citó la agencia de noticias EFE.
La viuda del líder muerto, Suha Arafat, señaló al canal francés de televisión RT su satisfacción por la participación de expertos rusos en los trabajos de investigación.
"Confío plenamente en ellos y estoy segura de su profesionalidad. Rusia siempre apoyó a Yasser Arafat y a la revolución palestina", afirmó la viuda.
El pasado 27 de noviembre fueron exhumados los restos de Arafat en el mausoleo de Ramallah, con el fin de determinar las causas de su muerte en 2004.
En el análisis de los restos también participan expertos suizos y franceses que interrogarán a las personas que trabajaron y estuvieron en contacto con Arafat entre el 1 de enero y el 28 de octubre de 2004, entre otros a sus médicos.
La muerte de Arafat fue denunciada en julio pasado a un tribunal de la ciudad francesa de Nanterre por Suha Arafat, que siempre dejó entrever la posibilidad de un complot contra su esposo.
Denuncia. La viuda presentó esta denuncia después de que el Instituto de Radiación Física de Lausana (Suiza), con la ayuda de la cadena de televisión Al Jazira, descubrió restos de polonio-210 (un raro metaloide altamente radiactivo), en algunas de las ropas y utensilios más privados de Arafat.
El palestino, fundador de la OLP y galardonado con el premio Nobel de la Paz en 1994, murió en un hospital militar cerca de París el 11 de noviembre de 2004, después de varias semanas de agonía en Ramallah, donde llevó cerca de tres años cercado por Israel.
El Polonio-210 también fue utilizado para matar en 2006 en Londres al antiguo espía ruso Alexander Litvinenko, cuya esposa acusa a Rusia de estar detrás del asesinato.