QUITO. La Fiscalía informó que el legislador de oposición Santiago Díaz Asque, denunciado por la presunta violación de una menor y por quien las autoridades ofrecieron una recompensa de 100.000 dólares, se entregó el lunes a las autoridades.
En un mensaje en su cuenta de X, antes Twitter, la Fiscalía precisó que en contra del asambleísta “pesa una orden de detención para formulación de cargos. Su situación jurídica se resolverá en las próximas horas”. No se dio detalles de la entrega.
La acusación contra Santiago Díaz Asque
El pasado 8 de julio se conoció la acusación contra Díaz Asque, quien fue elegido legislador por el movimiento político de oposición Revolución Ciudadana, liderado por el expresidente Rafael Correa (2007-2017) y una de las mayores bancadas de la Asamblea. Ese mismo día fue expulsado de la organización política, lo que no le impide mantenerse en el cargo.
Al día siguiente, la Fiscalía abrió una investigación y realizó tres allanamientos. La institución aclaró entonces que, aunque no pesaba una orden de aprehensión, el inculpado había sido citado a declarar.
Ante la desaparición de Díaz Asque, el gobierno ofreció hace una semana 100.000 dólares de recompensa por información que permitiera localizarlo.
El legislador afirmó que era inocente en una carta pública en la que aseveró que la denuncia era una “bajeza” en su contra y buscaba “silenciar” su voz ”incorruptible y crítica”. Añadió que solicitó licencia sin sueldo a la Asamblea, lo que fue denegado por el Legislativo. Tras ello no hubo más pronunciamientos.
En medio de la conmoción nacional derivada de las acusaciones contra el legislador, el presidente Daniel Noboa anunció el envío de una reforma constitucional que propone que los violadores sean sometidos a una castración química. La iniciativa deberá pasar el filtro de la Corte Constitucional antes de ser debatida en el Legislativo.
En tanto, Correa —máximo líder del partido Revolución Ciudadana— aseguró en una entrevista en los últimos días que el caso de ese asambleísta “nos ha llenado de vergüenza” y no cabe más que “pedir disculpas al pueblo ecuatoriano”.
La ley penal de Ecuador castiga la violación de menores de 14 años con prisión de 19 a 22 años.