Habla con una vertiginosidad casi impropia de una persona de 81 años. Y eso que confiesa que durmió mal y poco. “Siempre que tengo que viajar, tengo miedo de quedarme dormido”, explica.
Juan Carlos de Pablo bajó del avión que lo transportó de Buenos Aires a Córdoba poco después de las 8 de este jueves 21, y ocho horas después ya estaba de nuevo arriba de otro vuelo para el regreso.
En ese lapso conversó con comerciantes, empresarios y dirigentes que participaron en las 43ª Jornadas de Supermercadismo Argentino, que se desarrollaron en el Centro de Convenciones del Quorum Hotel.
Pasado el mediodía, dio una charla, a sala llena, para explicar su mirada sobre la coyuntura económica y política. También reveló parte de sus encuentros semanales con el presidente Javier Milei y hasta contó por qué le gustó la película Homo Argentum, que protagoniza el actor Guillermo Francella.
El economista cree que, pase lo que pase, la garantía del proceso estabilizador y de la baja de la inflación es la voluntad de Milei de sostener el equilibrio fiscal. “No está loco, es multifacético. Y es transparente”, sostuvo.
Horas antes, mantuvo un diálogo con La Voz, en el que opinó que los gobernadores sólo quieren “manguear” al presidente. También advirtió que el actual nivel de las tasas de interés es insostenible si se extiende más allá de las elecciones legislativas. Y consideró que en los procesos de recuperación económica es esperable una etapa de estancamiento como la actual.
–¿En qué fase del proceso de estabilización estamos?
–No hay fases. Esa es una labor de los futuros historiadores.
–Pero para entender la dinámica que vivimos desde que Javier Milei llegó a la presidencia: ¿esta parte es la más compleja?
–No sé. Lo que tenés es un presidente determinado. Lleva en la sangre el equilibrio fiscal. Y es totalmente consciente de las limitaciones que tiene. No tiene gobernadores, tiene pocos diputados, pocos intendentes. La política económica es el equilibrio fiscal más (el ministro de Desregulación) Federico Sturzenegger.
–Esa trama de contención política, aún con un buen resultado en las elecciones legislativas, ¿alcanza?
–La aspiración del oficialismo es tener suficientes legisladores a partir del 10 de diciembre para poder frenar la acción contra los vetos, hasta ahí. Como bien dice (Carlos) Ruckauf, por más que bien que le vaya en la elección de medio período, no va a tener mayoría absoluta en ninguna de las cámaras, con lo cual va a tener que seguir negociando.
–¿A qué atribuye la disparada de las tasas de interés?
–Yo no soy un especialista, pero por lo que escuché vencía una Letra, la cancelaron con, supongo, recursos del Tesoro, pusieron pesos en circulación, capaz el oficialismo creía que esos pesos iban a ir a un destino y fueron a otro, entonces reaccionaron. Como fenómeno permanente, es para agarrarse la cabeza. La hipótesis del oficialismo es que esto tiene un componente electoral muy grande, entonces dice: “Bueno, banquemos hasta después la elección”.
–Como fenómeno permanente, efectivamente es para agarrarse la cabeza.
–¡Y qué te parece!
–¿Y cómo se desinflama? ¿Sólo con confianza?
–Vamos a ver después de las elecciones, si es cierto o no. Si fuera cierto, ahí nos ocupamos.
–Y después de las elecciones, ¿cree que habrá un nuevo matiz en las políticas cambiaria y monetaria?
–No sé si matiz. Si hoy el tipo cambio llegara a $ 1.450, el Gobierno no tiene que cambiar la regla de juego, eso sería lamentable. Tiene que vender (dólares) y, obviamente, creo que es lo que va a hacer. Ahora, si después de la elección querés cambiar las reglas cambiarias, bueno, las explicás, pero tiene que tener sentido. Pero la clave es que, mientras tengas equilibrio fiscal y sin emisión monetaria de flujo, esa es una gran tranquilidad, porque te quedan las pulseadas, como ahora, de stocks entre pesos y dólares.
Equilibrio fiscal, principio y fin
–¿El equilibrio fiscal es la única garantía?
–Ha mostrado una potencia fenomenal. Todos en la facultad lo aprendimos, pero hay que tener pelotas para llevarlo adelante.
–¿Parte de esto también se manifiesta en la puja con los bancos? Porque también se acostumbraron a la deuda remunerada.
–Sí, eso es cierto. Los bancos, llevados por las reglas de juego, se habían encontrado que con el anterior gobierno el negocio consistía en captar depósitos y prestarle al Estado. Ahora viene un Estado que dice: “No te preciso más”. Y no tenés más remedio que redireccionar la actividad.
–Hablando de actividad. Se estancó.
–Vos tenés que esperar que una reactivación arranque fuerte y después vaya más lineal hacia adelante. Ayer (por el miércoles 20) salió el Emae (estimador mensual de la actividad económica). Cuando hay mucha fluctuación en los resultados generales, la vista se corre a la derecha y agarra la tendencia ciclo, que es un ajuste que se hace para sacar los elementos más volátiles. Y bueno, está en 0,3%.
–Sí, 0,3... pero lo ha repetido tres meses seguidos.
–Veo que mirás con mucha atención. Todas esas técnicas son muy sensibles. Tal como era de esperar, es así. Ahora, la realidad es heterogénea, muy heterogénea. No a todos les va igual, porque la micro también importa.
Gobernadores, impuestos y “mangueo”
–Se escucha, cada vez más fuerte, una especie de cacerolazo verbal por los impuestos, no sólo por lo nacional, sino por lo que se acumula con provincias y con municipios.
–Es muy interesante lo que decís porque, para un empresario, para cualquiera que tiene que tomar una decisión, no es lo mismo el gobierno que el Poder Ejecutivo, porque también están el Poder Legislativo y el Poder Judicial. Por ejemplo, lo que escucho en materia laboral es que el problema está en que algunos fueros laborales interpretan (la ley) como les parece, por caso, cómo hay que ajustar los valores de una indemnización laboral. La Corte Suprema dice: “Déjese de joder”, y los tipos ignoran lo que dice la Corte Suprema. Y además tenés Gobierno nacional, gobiernos provinciales y gobiernos municipales. Claro, se diluye la responsabilidad.
–¿Cómo consensuar, entonces?
–¿Quién va consensuar? Nooo…
–¿Es muy cándido pensar en eso?
–Uno tiene que entender la lógica decisoria. Se juntan los 24 gobernadores con el presidente, ¿para qué? Para manguearlo. O el gobernador de una provincia equis se junta con el presidente para mostrarle el esfuerzo que está haciendo. No, está mangueándolo. ¿Viste que está este tema de la distribución de los ATN? Cuando no tenés presupuesto, es muy discrecional el poder central, entonces, uno debería decirles a la oposición, a los gobernadores, que hagan fuerza cuando se vote ahora un presupuesto en serio y evitar muchas de estas discusiones. Veremos.
–La Unión Industrial viene advirtiendo por la pérdida de empleos. Hay un lobby creciente para nivelar la cancha y tener las mismas condiciones para poder competir…
–No sé cuán fuerte o cuán específico es ese lobby. No he hablado con el actual presidente (Martín Rapallini), algunas veces lo hice con el anterior (Daniel Funes de Rioja), y yo le decía: “La negociación, aquí y ahora, es específica. Andá a verlo a Federico Sturzenegger y decile cuáles son las cosas que te están molestando”. Porque no se puede partir de la base de que el tipo las conoce. Hoy la negociación es una cosa muy específica.
–¿Cuál es el vector del crecimiento de Argentina? ¿Dónde tenemos que apuntar?
–Acá hay un tema de reglas de juego y decirles a los empresarios “hacé la tuya”, las oportunidades son individuales.
–¿Y para la gente en general? ¿El empleo?
–Es exactamente lo mismo, el tipo se levanta a pelearla todo el santo día, sea formal o informal.
–Milei habló en campaña de las reformas de segunda generación. Hablamos de lo laboral, lo tributario, lo previsional. Se supone que eso debería exponerse el año que viene…
–Bueno, vamos a ver cómo lo hacen. Yo cuando digo que toman decisiones sobre la base del equilibrio fiscal, ¿cómo lo van a lograr? Ni ellos saben. La clave es la determinación del tipo (por Milei), que dice: “No sé cómo lo voy a hacer, pero lo voy a hacer”.
–¿Esa es la lógica de decisión de Milei?
–Es transparente, este pibe es transparente. El tipo dice “no hay plata, no joda, no pierda tiempo conmigo”. Cuando lo dijo por primera vez, el 10 de diciembre de 2023, era puro futuro y capaz que vos le creías o no. Hoy ya tenés un año y medio. Mejor que le creas.
–¿Le preocupa el nivel de reservas?
–Mientras tengamos flotación, las reservas no sirven para nada. La lógica de la flotación es que no necesitás reservas para flotar.
–¿Y la lógica de la flotación de tasas?
–Como fenómeno permanente, cualquiera se da cuenta de que no podés tener estas tasas reales. Si esto trasciende un tema electoral, hay que plantearlo de otra manera.