La empresa Mastellone Hermanos SA, controladora de la marca La Serenísima, informó este viernes que perdió más de 1.000 millones de pesos en el primer trimestre de 2022 porque no puede trasladar a los precios los aumentos en los costos.
El “rojo”, comunicado a la Comisión Nacional de Valores (CNV), ascendió a $ 1.024 millones. Para comparar, en los tres primeros meses de 2021 había acumulado un resultado negativo de $ 828 millones. El quebranto del primer trimestre de 2022 se ubica así por encima del registrado en igual período del año anterior, aunque por debajo de los $ 1.470 millones del primer trimestre de 2020.
En tanto, todo el año pasado la compañía tuvo un quebranto que se ubicó en los $ 2.300 millones. Fue superior al total de 2020, que marcó un rojo de $ 2.287 millones, según el informe publicado por el diario La Nación.
“Estos resultados reflejan una nueva caída de sus márgenes operativos, producto de no poder trasladar los permanentes incrementos de sus costos a los precios de venta. Al igual que en períodos anteriores, lejos de impulsar el índice de precios al consumidor, la compañía absorbe inflación de costos, en detrimento de sus resultados económicos”, señaló la empresa.
Pese a no citarlo, esta última frase estuvo dirigida al secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti. En marzo pasado, Comercio Interior había apuntado contra la empresa, entre otras, por supuestamente priorizar el abastecimiento a los comercios de proximidad por sobre los supermercados, afectando de esta manera al programa +Precios Cuidados.
Precios Cuidados
La empresa tiene en Precios Cuidados más de 20 productos que representan, en términos de volumen, más de un 50% de lo que procesa diariamente. En ese programa, para el primer trimestre se autorizó una suba mensual del 2% en tanto que con la última revisión, de abril pasado, se pasó a un 3%. Se trata de números muy lejos de la inflación actual.
En otro tramo de su comunicado precisó: “Mastellone Hermanos solamente procesa el 12% de la leche cruda del país y siempre priorizó su producción y comercialización para abastecer la demanda del mercado interno. En este sentido, participa desde hace años de los programas dispuestos por el gobierno nacional, como Precios Cuidados, cuyos precios recién han podido ser actualizados en enero del corriente año luego de cinco meses desde el incremento previo”.
El julio del año pasado, la empresa informó que refinanció 200 millones de dólares. Eso fue con la emisión de un nuevo bono internacional por un monto de casi U$S 111 millones, además de la colocación, por primera vez en su historia, de Obligaciones Negociables en el mercado de capitales de Buenos Aires por un equivalente a US$45 millones. En paralelo, obtuvo un financiamiento bancario externo de largo plazo por U$S 50 millones otorgado por Coöperatieve Rabobank.
Señal de que las cosas no son tan simples para la compañía, en febrero pasado, luego de años de ser líder en la compra de leche cruda al productor, cedió el primer lugar en el podio a la canadiense Saputo, según fuentes del sector citadas por el medio porteño.
