En un escenario económico marcado por la volatilidad política y económica, propia de los procesos electorales de la Argentina, las pequeñas y medianas empresas (pymes) se enfrentan al desafío de crecer para sobrevivir. ¿Cómo se hace? Con un cambio de paradigma profundo, dejando atrás viejas lógicas y asumiendo la necesidad de gestionar la incertidumbre.
“Es común escuchar que la incertidumbre es un mal endémico de Argentina. Pero la incertidumbre no es un patrimonio argentino. Los argentinos creemos que somos los únicos en el mundo que vivimos con incertidumbre. El mundo vive en incertidumbre. La clave no es eliminarla, sino amigarse con ella y aprender a gestionarla”, aseguró Jonatan Loidi días atrás en Córdoba.
El consultor y uno de los divulgadores para el mundo hispano de la cultura Disney, participó el miércoles 3 de Somos Pymes Summit Competitividad 2025, que se realizó en Córdoba. Allí expuso sobre lo que denominó “El camino del 5%”, referido a cómo hacer cosas extraordinarias en un mercado que requiere diferenciación.
“El que no haga cosas extraordinarias realmente va a ser reemplazado por lo rápido, fácil y barato”, dijo. Sobre esto, advirtió que la clave es informarse, monitorear tendencias y entender qué variables se pueden dominar y cuáles sólo observar.
Olvidarse de las elecciones y de una devaluación
Loidi recomendó dejar de utilizar las elecciones y la coyuntura política como excusa para detenerse, ya que genera un ciclo sin fin que impide el progreso.
“Si vamos a estar todos los argentinos pensando siempre en las elecciones, no cambiamos más, porque después de esta viene otra elección en 2027”, destacó.
El ejecutivo pidió a las pymes que se enfoquen en su eficiencia, desarrollen modelos de negocio robustos, apliquen estrategias de marketing y ventas, y optimicen su producción.
“Ser empresario hoy es una profesión que requiere la misma dedicación y formación que un neurocirujano: años de estudio, capacitación constante, inversión en profesionales y una mentalidad de aprendizaje continuo. El mundo de los negocios es hostil, como una selva, y exige estar preparado, ser un buen ‘cazador’ y ser competitivo para sobrevivir y crecer”, expuso.
También pidió al empresario pyme que deje de esperar una devaluación para ver mejorar su competitividad, ya que esta idea demostró ser una estrategia de muy corto plazo y, además, perjudicial para el desarrollo a largo plazo del país.
“Hay que dejar de esperar que la ‘marea’ externa resuelva los problemas; en su lugar, hay que invertir en la propia competitividad, capacitación y adaptación. Solo así las pymes argentinas podrán transitar la incertidumbre y construir un futuro de crecimiento sostenible”, reflexionó.
“Cambiar el chip”
Para Loidi, a su estilo, el Gobierno ofrece “certidumbres”, ya que definió como objetivos evitar el déficit, mantener una moneda sólida, bajar la inflación y abrir la economía argentina al mundo. Esta nueva certidumbre puede poner en crisis a algunas pymes, pero proporciona una hoja de ruta que antes no existía.
Según el consultor, en años anteriores muchas empresas argentinas escondían sus ineficiencias con aumentos de precios y devaluaciones del peso. Este modelo, al que denomina “antimanagement”, generaba reglas de negocio que no existen en ninguna otra parte del mundo. Un ejemplo claro es que el stock era sinónimo de riqueza, mientras que en un contexto de estabilidad, el stock puede llevar a un negocio a la quiebra.
Bajo el gobierno de Javier Milei, el empresario pyme debe “cambiar el chip”, resaltó, ya que en la actual economía se requieren “negocios de verdad”, donde la competitividad no proviene de una devaluación, sino de la eficiencia, la estrategia, el marketing y la gestión de costos.
“Ya no es el gerente de finanzas el ‘rey’ de la empresa, sino que debe serlo el gerente de Marketing, como ocurre en la mayoría de los mercados globales. Aquellas pymes que no estén dispuestas a cambiar este chip se encontrarán en una posición de vulnerabilidad”, indicó.
Ante este panorama, Loidi propuso en el evento emprender “El camino del 5%”.
“Si quieres ser del 5% de las personas que hacen cosas extraordinarias, tendrás que hacer lo que el otro 95% no está dispuesto a hacer”, dijo a los empresarios pymes.
Hacer cosas extraordinarias, según el CEO de Gruposet, significa diferenciarse no sólo en “qué” se ofrece, sino en “cómo” lo hace. Esto implica profundizar en el servicio, la atención y la experiencia del cliente.
Al respecto, tomó como ejemplo empresas como Disney, que crean experiencias memorables, para alejar el foco del precio y centrarse en la creación de valor. En lugar de competir por ser el más barato, las pymes deben generar un valor tan significativo que el cliente esté dispuesto a pagar por ello, sin importar si es más caro o más barato.
Valor agregado
“Argentina tiene que ir por la generación de valor. Nosotros tenemos que transformar una matriz productiva de materias primas a una matriz productiva de producto de alto valor”, reflexionó Loidi. Para el especialista, Nueva Zelanda es un ejemplo para el país, que produce materias primas similares a las argentinas. Para las pymes, esto se traduce en la necesidad de innovar, trabajar en el servicio y construir una marca sólida.