Históricamente, el dinero fue un tema tabú para las mujeres. Mientras se habla de política o sexo, el cuánto se gana o cuestan unas vacaciones es un tema silenciado.
Esta falta de diálogo genera miedos y desconocimiento, y se agrava por el hecho de que a las madres, por ejemplo, no se les espera que hablen de negocios en la puerta del colegio, sino de actividades extracurriculares.
Las mujeres ganan menos y gastan más, piden sueldos más bajos por vergüenza y no negocian descuentos.
En una entrevista con La Voz, Carolina Sur, economista especializada en finanzas personales, explica por qué la educación financiera es clave para transformar hábitos, cómo dar el primer paso para pasar de gastadora a inversora y qué cambios de mentalidad pueden marcar la diferencia a la hora de generar riqueza. También comparte una guía de finanzas saludables dedicada especialmente a las mujeres, material de su nuevo libro.
El tabú de hablar de dinero

“Las mujeres seguimos teniendo menos educación financiera porque no está muy bien visto que hablemos de plata, que hagamos networking o que conversemos de trabajo”, plantea la especialista.
Los estereotipos sociales siguen reforzando la idea de que ellas deben ocuparse de la familia y del consumo, mientras que el éxito económico y la inversión son territorios masculinos.
De todos modos, la economista aclara que eso se puede cambiar, y que el primer paso es el autoconocimiento. En su nuevo libro, De gastadora a inversora, la autora sostiene que la sociedad debe derribar mitos vinculados a que las mujeres están hechas para gastar o que son compradoras compradoras por naturaleza.
“El primer paso real para pasar de gastadora a inversora es darnos cuenta que nosotras también podemos ganar y no sólo gastar. Es entender que no necesitamos más planillas de Excel o más aplicaciones, sino autoconocimiento”, describe.
Consultada sobre el hecho de que los hombres también son gastadores, Sur recuerda que cuando se busca en Google o ChatGPT imágenes de personas gastando, aparecen mujeres con bolsas de compras. Cuando se busca imágenes de personas invirtiendo, aparece un hombre mirando una pantalla con gráficas.
“Existe un estereotipo y las campañas de marketing están enfocadas en las mujeres, apuntando a sus necesidades y haciendo que sea más fácil gastar, al mostrar constantemente cosas atractivas”, señala.
Errores financieros más comunes
El error más común que detecta la especialista en finanzas en las personas que buscan ahorrar o comenzar a invertir es que quieren hacerlo con planilla Excel o a partir de los que escuchan en las redes sociales, y no con autoconocimiento, entender qué es lo que dispara el gasto, pedir un delivery.
“Eso es lo que hace que no lleguen a un puerto. En realidad, lo intentan, pero a los pocos días están gastando de nuevo o pasan por alto anotar”, grafica.
Entonces, cómo puede empezar alguien con poco dinero y sin conocimientos previos a invertir.
Sur remarca que una persona puede empezar a invertir de la misma forma que empieza a gastar con tarjeta de crédito: con poco conocimiento y poco dinero. Invertir es poner el dinero a trabajar, y se puede hacer con lo que se tenga. Cuanto menos dinero se tiene, más importante es buscar instrumentos que ayuden a generar más dinero, en lugar de gastar más.
Cómo dejar de gastar y comenzar a generar riqueza
Para dejar de gastar y empezar a generar riqueza, el primer paso es un cambio de mentalidad. Reconocer que sí es posible y que depende en gran medida de las decisiones diarias.
Luego, detalla la experta, conviene detenerse a analizar por qué gastamos como lo hacemos: ¿es para impresionar a otros, por una creencia aprendida en la infancia, por ansiedad o simplemente por costumbre?
Identificar esas motivaciones permite ordenar prioridades y cortar con los gastos que no aportan valor. A partir de ahí, el hábito clave es abrir la conversación: hablar con amigas, con la pareja o con personas de confianza sobre dinero, ahorro e instrumentos de inversión.
“Convertir al dinero en un tema cotidiano y no en un tabú es la base para pasar de gastar sin control a construir riqueza con conciencia”, insiste.

3 tips cortos y breves para empezar a invertir
Sur enumera tres claves simples para dar los primeros pasos en la inversión.
- Evitar la “parálisis por análisis”, porque si nos quedamos sólo mirando opciones nunca vamos a empezar.
- Elegir el instrumento financiero que mejor se adapte a nuestro perfil: si somos más conservadores, basta con algo que proteja de la inflación sin asumir grandes riesgos.
- Entender que invertir no es una apuesta al azar ni algo lejano. Existen alternativas seguras y accesibles que permiten hacer crecer de a poco el dinero que ya tenemos.