Luego de un desplome récord durante buena parte de 2024, el consumo comenzó a recuperarse de manera heterogénea. Mediciones de la consultora NielsenIQ (NIQ) precisan que entre fines de 2024 y el primer semestre de este año, rubros asociados al poder adquisitivo en dólares o el mayor acceso al crédito lograron remontes de dos dígitos (autos cero kilómetros, turismo, etcétera). Sin embargo, al consumo masivo, ese que llena el changuito, le está costando mucho más levantar cabeza: cayó 16% interanual en 2024 y consiguió, entre enero y junio de este año, crecer un 1,2%. “La estimación es lenta y parcial. Cerrará en diciembre en un +3% anual; y estimamos otro +3% en el 2026″, aseguró a La Voz Julián Fernández, analista de la consultora.
Esa foto dispar de las ventas espeja las diferencias en la situación de ingresos de las familias argentinas. Tendencias ARG H1 2025, el flamante informe elaborado por NIQ, conecta la recuperación del consumo a la baja en la inflación y a un aumento en el ingreso disponible en los hogares, aunque precisa que ese incremento es muy dispar entre las distintas clases sociales.
“Los sectores de ingresos más altos logran seguir la inflación y, en un escenario de estabilidad y dólar bajo, reconfiguran su gasto por fuera del consumo masivo y el dinero que se llevan todos los gastos fijos”, explican desde la consultora.
Almacén vence a autoservicio
Planteado ese escenario, ¿qué formatos comerciales se desempeñan en positivo en este contexto? ¿En qué canales hay señales positivas o zonas de oportunidad?
“En consumo masivo, almacenes y farmacias retail son dos tipos de comercios que muestran mejor desempeño. El primero es el que más crece: 7% real en el primer semestre. En el caso de ese perfil de farmacias, la suba es del 8% al 9%”, precisa Fernández.
Los motivos: “El éxito relativo del almacén se asocia a que la gente compra lo justo y necesario. Ese formato hace sinergia con la clase social que tiene ingresos quincenales y hasta diarios; y compra lo que necesita en el día. Es cercano y ha ganado mayor surtido en productos y marcas, con alta presencia de alternativas de bajo precio”, analiza Fernández. En un canal donde las bebidas pesan históricamente el 50%, es notable el mayor despliegue de las categorías limpieza y cosmética como un modo de responder a la demanda del público y ganarle la pulseada los autoservicios.
Farmacias retail, en tanto, también dan con la tecla: “Estas cadenas tienen una agresividad promocional notable en cosmética y eso les permite tener el crecimiento que tienen. Trabajan con la lógica del supermercados. Por otra parte, le están ‘robando’ la impulsividad (el gustito que se da el consumidor, muy asociado a las golosinas) a los quioscos con surtido y agresividad en los precios. Así capitalizan ocasiones de consumos que antes eran del quiosco”, cierra Fernández; aludiendo a ese universo donde juega Farmacity y cadenas locales como Red o Líder.
Pizzas, empanadas y pestañas
Desde el variadísimo mundo de las franquicias, Daniel Arce, socio fundador de Franquicias que Crecen, asegura que ese mecanismo que permite iniciar un negocio con mayor seguridad prueba su resiliencia en contextos como el actual. Y da algunas claves: “En lo que hace a la variable inversión, el 80% de las franquicias que se venden son las que requieren menos de U$S 50 mil de arranque; en general de autompleo, porque el margen que generan está entre U$S 1.000 y U$S 1.500 mensuales”.
El formato más demandado son pizzerías y empanaderías low cost, con pequeñas barras para comer parado o llevar, y delivery. Requieren una inversión de U$S 30 mil a U$S 40 mil, rinden entre U$S 2.000 y U$S 3.000 mensuales; y sintonizan con hábitos en crecimiento en la población.
“En segundo lugar están los negocios de estética: pestañas, uñas, cejas. Demandan U$S 40 mil a U$S 50 mil y dejan U$S 3.000 a U$S 4.000 de ganancia. La gente consume esos servicios más allá de la restricción económica, no deja de cuidarse”, revela Arce.
“Boom” de concesionarios
En el primer semestre de este año, se abrieron en todo el país 27 nuevos concesionarios. Entre enero y julio, se patentaron 388.680 vehículos, 71,5% más que en ese lapso de 2024 y en Córdoba, los 43.433 patentamientos de este período fueron casi el doble (90%) que los de 2024. Aquí hay uno 60 concesionarios de autos.

El crédito UVA y la financiación de planes de ahorro fueron las grandes palancas de este fenómeno y, aunque la disparada de tasas desde julio complicó algo el esquema, en el sector consideran el problema como “coyuntural”. A la vez, las promociones no desparecieron por completo.
Sebastián Parra, voz de los concesionarios como presidente de Acara Regional Córdoba, agrega: “El negocio está dinámico porque el gobierno nacional habilitó a que 50 mil vehículos híbridos y eléctricos entren al país con licitación eximidos del 35% de impuestos. Eso hizo que esas unidades, competitivas en el mundo en especial de marcas chinas, desembarquen con concesionarios nuevos”.
BYD, Geely, Chery, Saic (con MG), Baic y Haval son marcas que llegaron o están entrando a Córdoba, de la mano de operadores locales con experiencia. “En el segundo semestre habrá más desembarcos. Estos nuevos formatos necesitan mucho volumen y eficiencia, y el problema en Argentina es que tienen muchos impuestos. La rentabilidad ha bajado y eso obliga a las empresas a ser muy eficientes”, reflexiona Parra.
La mayor cantidad de modelos se ubica entre los $ 20 millones y $ 30 millones; y el 50% se vende con financiación. El sector espera una dinámica aún mejor luego de que las elecciones de octubre disipen la incertidumbre y la tensión electoral.
Alquileres comerciales: dónde y cuánto
¿Qué dice el mercado de alquileres respecto de las preferencias comerciales? “Con la mayor estabilidad, la baja del dólar y cierta recuperación del consumo, entre fines de 2024 y principio de año los locales comerciales volaban. Comenzaron a lograr una renta en dólares del 8% a 10% anual cuando venían del 2,5% en la pandemia”, repasa Matías Merguerian, titular de MVRE Consultora.
“Las estrellas fueron los locales en nuevos complejos comerciales ubicados en zonas de crecimiento urbano: Manantiales, Valle Escondido, Docta y los corredores del sur, camino a San Antonio y a San Carlos. Se pagaron precios fenomenales marcando un récord histórico del m2 debido a la falta de oferta y el interés de muchas marcas de estar allí, cerca de esa población, y llegar primeras”, continúa el referente del mundo inmobiliario.
En zonas de nuevo desarrollo comercial los valores de referencia general para alquilar se mueven entre 25 mil y 35 mil pesos el m2, según dimensión y ubicación.
No obstante, Merguerian advierte el impacto del año electoral, que tiende a pausar inversiones y aperturas; y describe un cambio de tónica: “En abril comenzó a costar un poco más alquilar locales disponibles y mayo fue el último mes en el que la demanda de locales estuvo activa. Hay un amesetamiento, la gente sabe que vienen las elecciones y muchos no tienen margen para aguantar cuatro meses hasta que se reactive la economía”.
Para ponerlo en datos: en la base que monitorea MVRE Consultora la oferta de locales en alquiler pasó de 471 en abril a 539 en agosto.