Daniel Herrero, CEO de Prestige Autos, la firma que ha tomado las operaciones de Mercedes Benz en Argentina, consideró que el principal cambio de los últimos tres años en el mercado automotor fue “la competencia”.
“Cambiaron las reglas y tenemos que competir”, recalcó.
“La industria automotriz está pasando por un proceso de transformación muy grande y hay que ser más eficientes, porque hay que producir más con lo mismo que tenés garantizando la calidad”, dijo el extitular de Toyota a La Voz En Vivo.
“La eficiencia es un gran pendiente de América Latina, en comparación con Asia es un 5 a 1″.
“En el caso de Mercedes y de Prestige tienen clara la dirección y dispuestos a enfrentar este desafío”, añadió.
Señaló que a mediano y a largo plazo hay que pensar en: “Bajar burocracia, estabilizar y tener una proyección de cómo vamos a manejar algunos impuestos que son distorsivos y complican a la industria (ingresos brutos e impuesto al cheque)”.
Sobre las elecciones y el crédito
Consultado sobre las elecciones de octubre, consideró que los empresarios “buscamos estabilidad de reglas”.
“La estabilidad te permite planificar crecimiento”.
Herrero destacó la aparición del crédito que se ve reflejada en el 75% de las ventas en el sector. “Si bajan las tasas, tal vez tengamos autos de los más baratos con cuotas de 400 mil pesos por mes”, sostuvo.
La planta de Virrey del Pino tiene previsto fabricar en 2025 unas 16 mil unidades, con un crecimiento de 20 mil vehículos para 2026.
Sobre la importación, consideró que el plan era vender 1500 vehículos, pero que tal vez se llegue a los 2700.
Productividad
“No hay que tenerle miedo a las nuevas tecnologías. Hay que invertir para crecer y no para sacar gente”, sostuvo.
En ese sentido consideró oportuno invertir en inteligencia artificial y en robotización “con incorporación tecnológica que permita eficientizar la productividad, bajando costos” siempre recalcando de que esa tecnología no debe reemplazar gente, sino producir más y mejor.
La Mercedes-Benz Sprinter es una camioneta versátil y adaptable, disponible en versiones furgón, combi y chasis, con diferentes opciones de motorización y equipamiento. Se comercializa en Argentina desde la planta de Virrey del Pino para varios mercados de latinoamérica. Ante la pregunta sobre este producto señaló que la, planta en Argentina ya no pierde plata con la exportación.
“El ausentismo mejoró muchísimo en los últimos años, estamos entre un 3 y 6 por ciento”, señaló sobre otro de los puntos consultados.