- Es por una protesta realizada por el sindicado en el centro de distribución de la cadena de supermercados.
- La empresa tiene siete tiendas en Córdoba y 740 empleados directos.
El grupo De Narváez, nuevo dueño de las cadenas Walmart, Changomas y Punto Mayorista, denunció ser victima de una protesta organizada por el sindicato de Camioneros que jaquea la operación normal de sus sucursales; incluidas las siete de las tres marcas que tiene en Córdoba.
Según denuncia la empresa, el sindicado liderado por Hugo Moyano realiza en las últimas dos semanas “recurrentes medidas de fuerza encubiertas” que, acusa la firma, “derivaron en una caída del 75 por ciento en la distribución de alimentos básicos y en un desabastecimiento de productos esenciales a más de 1.000.000 de familias en todo el país.”
"El resentimiento que estamos teniendo por esto en terminos de desabastecimiento en nuestras sucursales se esta sitiendo por igual en todo el país, en nuestras 92 sucursales incluidas las de Córdoba", señaló a La Voz Juan Pablo Quiroga, director de Relaciones Institucionales de Walmart Argentina.
"Las tiendas de gran porte como Walmart o Punto Mayoristas tienen un tiempo algo mayor hasta que el resentimiento impacte con mayor fuerza debido a la escala de sus depósitos, las más chicas sienten un impacto más inmediato", añadió Quiroga.
Walmart atribuye las medidas a un reclamo de Camioneros que considera ilegal: “Recibimos el pedido por parte del Sindicato de Choferes de Camiones de despedir al personal afectado a nuestro Centro de Distribución, indemnizarlo y volverlo a contratar con la misma antigüedad. Una práctica ilegítima, no prevista por ningún marco legal vigente, ni con la forma en que desarrollamos nuestra actividad en el país”.
El pedido citado se fundamenta en el cambio de propiedad de la empresa, adquirida por el grupo De Narváez a fines de 2020.
Antecedente en los residuos
Vale recordar que la medida que reclama camioneros se aplicó en distintas ocasiones sobre los recolectores en los sistemas de recolección de residuos, incluido el de la ciudad de Córdoba: al término de finalización de la concesión de una empresa y el ingreso de otra, los empleados eran traspasados (conservaban sus puestos laborales) pero cobraban una indemnización por despido, se supone, en compensación a la pérdida de algunos ítems perdidos como la antigüedad.
En este caso, la cadena de supermercados la considera improcedente ya que lo ocurrido fue un cambio de propiedad de la misma compañía; que no implico cese de operaciones.
“Somos un grupo argentino que en noviembre de 2020 adquirimos las acciones de Walmart en el país con el firme propósito de invertir, desarrollar, crecer y asegurar los más de 10.000 puestos de trabajo a nivel nacional. Un compromiso que, en un contexto adverso para la inversión, buscó hacer de nuestra estrategia de crecimiento una opción para todos”, expresó Walmart en su solicitada.
Y agregró: “Invitamos al Sindicato de Choferes de Camiones y a aquellos colaboradores de nuestro Centro de Distribución que hoy no están cumpliendo con el normal desarrollo de la operación a dejar sin efecto las medidas y solicitamos al Gobierno Nacional arbitrar los medios con miras a garantizar el abastecimiento de todos los hogares argentinos.”
El conflicto no detonó aún la participación del Ministerio de Trabajo.
Entre las siete tiendas que la empresa tiene Córdoba emplea a más de 740 personas.
