Con profundo pesar, la comunidad gastronómica de Córdoba tomó conocimiento este viernes del fallecimiento del empresario Aldo Alcázar, a los 70 años de edad.
La noticia pegó duro también en su abigarrado grupo de amigos que lo acompañaron durante el trance ocasionado por enfermedad que ocasionó su deceso.
Alcazar, como parte de un emprendimiento familiar, desarrolló el negocio del catering cuando esta actividad no existía en Córdoba, lo cual dio el puntapié a que emergieran numerosas organizaciones del rubro.
También fue parte de una de las primeras cervecerías artesanales de esta Capital en la década del ‘90, llamada HBH y operó el área gastronómica del Predio Ferial Córdoba.
Creó, asimismo, Aeroruta que atendió la creciente demanda de la actividad aerocomercial, el restaurante La Hacienda, administró en una época muy difícil el autódromo Oscar Cabalén y abrió Chateau Milenium en Villa Allende, emprendimiento que continuó hasta su fallecimiento.
Algunos lo consideran un pionero de la actual fisonomía de la gastronomía y los servicios de Córdoba.
“Nos tocó pasar de los servicios de lunch a una empresa de catering, lo cual derivó en eventos especiales”, comentó hace unos años en una entrevista televisiva por Canal 10. En esta nota recordó que en el apogeo de la actividad entre todos los emprendimientos llegaron a atender 15 mil cubiertos en un mismo día de trabajo.
En su vida personal, tuvo un hijo, Conrado, y además cultivaba el hobby de los autos antiguos, con el cual participó en distintos eventos a nivel local y nacional.
Aldo Alcazar será velado mañana sábado de 9 a 13 en su domicilio particular de Villa Allende.
