Fernando Artese, de 63 años, que planeaba autodeportarse, fue detenido en Estados Unidos y enviado al centro de detención migratorio conocido como “Alligator Alcatraz” de la Florida.
Fernando Artese vive en el país con su esposa y su hija. El hombre fue detenido en un control vehicular donde los oficiales notaron que su licencia de conducir estaba vencida. A raíz de esto, detectaron que su estatus migratorio era irregular.
En su caso intervinieron las embajadas de Argentina e Italia, ya que Artese tiene doble nacionalidad.
Luego de la detención, el argentino fue enviado al cuestionado centro de detención conocido como “Alligator Alcatraz” inaugurado por Donald Trump el 1 de julio pasado.
Pasados unos días, Artese junto a otro ciudadano italiano fueron trasladados a Krome, otro centro de detención de Miami, Florida.
El argentino fue detenido en el condado de Martin, pero como fue considerado un inmigrante indocumentado, su caso fue derivado al Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE). Allí lo trasladaron a “Alligator Alcatraz”.
La experiencia de Artese en “Alligator Alcatraz”
La esposa del argentino detenido, Mónica Riviera dialogó con CNN en Español.
La mujer comentó sobre la experiencia de su esposo en la cárcel inaugurada por Trump, donde “la comida era mínima, tan solo una manzana, una barra de cereal, una bolsita de papas fritas y un sándwich con una sola rebanada de mortadela y otra de queso”.

Además, Riveira denunció el trato humillante que sufrió su esposo y los demás detenidos mientras este se encontraba en el lugar. “Para salir de su celda, deben caminar con las manos en la nuca, como si fueran criminales peligrosos. Lo más doloroso es que muchos de los que están allí no cometieron ningún delito. Son trabajadores que emigraron para darles un mejor futuro a sus familias”.
Marcela Rivera habló del caso particular de su esposo: “Fernando montó una empresa, prosperó y aportó al país. Sin embargo, hoy está encerrado como si fuera lo peor de lo peor”.
Volver a la Argentina como solución
Artese vive en Florida desde hace una década. El hombre estaba concretando su regreso a la Argentina, en un motorhome con su familia, en el momento que fue interceptado por el control.
El argentino pensaba autodeportarse junto a su familia. “Nosotros queríamos irnos y así como queremos hacerlo ahora”, contó la esposa luego de la detención de Fernando.
Incluso, proyectaba documentar el viaje en un canal de YouTube al que bautizó Argentinomades, informó CNN en Español.
Pero el viaje quedó frustrado a apenas a unos kilómetros del punto de partida. La casa rodante fue detenida en un control policial en la zona de Jupiter Beach, en Florida.
“Fue duro tomar la decisión (de volver a la Argentina) porque llevamos muchos años (en Estados Unidos) y se habían logrado muchas cosas. Pero veíamos que la proyección para la familia era mala y, cuando asumió Donald Trump, confirmamos que era el momento justo para hacerlo”, dijo su esposa, Mónica Riviera a CNN en Español.