DEIR AL-BALAH, Franja de Gaza (AP) — Hamás tiene previsto liberar el jueves a tres rehenes israelíes más, así como a cinco cautivos tailandeses, e Israel liberaría a otros 110 prisioneros palestinos, en el tercer intercambio de este tipo desde que un alto el fuego en la Franja de Gaza se estableció a principios de este mes.
La tregua tiene como objetivo poner fin a la guerra más mortal y destructiva jamás librada entre Israel y Hamás, cuyo ataque del 7 de octubre de 2023 contra Israel desencadenó los combates. El cese al fuego ha prevalecido a pesar de una disputa a principios de esta semana sobre el orden de liberación de los rehenes.
Los israelíes que se espera sean liberados son Arbel Yehoud, de 29 años, Agam Berger, de 20 —quien fue secuestrada junto con otras cuatro mujeres soldado liberadas el sábado— y Gadi Moses, un hombre de 80 años. Por el momento no se conocían las identidades de los ciudadanos tailandeses que serán liberados.
Varios trabajadores extranjeros fueron capturados junto con decenas de civiles y soldados israelíes durante el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023 que desencadenó la guerra. Veintitrés tailandeses estaban entre los más de 100 rehenes liberados durante un alto el fuego de una semana en noviembre de 2023. Israel dice que quedan ocho.
De las personas que se espera sean liberadas de las prisiones en Israel, 30 cumplen cadenas perpetuas después de ser condenadas por ataques mortales contra israelíes. Zakaria Zubeidi, un destacado exlíder miliciano y director de teatro que participó en una espectacular fuga de prisión en 2021 antes de ser detenido de nuevo unos días después, también está entre los que se espera sean liberados.
Israel dijo que Yehoud debía haber sido liberada el sábado y retrasó la apertura de los cruces hacia el norte de Gaza cuando eso no ocurrió.
Estados Unidos, Egipto y Qatar, que mediaron el alto el fuego después de un año de duras negociaciones, resolvieron la disputa con un acuerdo según el cual Yehoud y otros dos rehenes serían liberados el jueves. Estaba previsto que otros tres rehenes, todos hombres, fueran liberados el sábado, al igual que docenas de prisioneros palestinos más.
Israel comenzó a permitir el lunes que los palestinos regresaran al norte de Gaza, la parte del territorio más devastada, y cientos de miles volvieron. Muchos sólo encontraron montones de escombros donde antes estaban sus hogares.
En la primera fase del alto el fuego, Hamás tiene previsto liberar a un total de 33 rehenes, incluyendo mujeres, niños, adultos mayores y hombres enfermos o heridos, a cambio de casi 2.000 prisioneros palestinos. Israel dice que Hamás ha confirmado que ocho de los rehenes que se liberarán en esta fase están muertos.
Los palestinos han celebrado la liberación de los prisioneros, ampliamente considerados por los palestinos como héroes que se han sacrificado por la causa de poner fin a las décadas de ocupación israelí en las tierras que reclaman para un futuro estado.
Mientras tanto, las fuerzas israelíes se han retirado de la mayor parte de Gaza, permitiendo que cientos de miles de personas regresen a lo que queda de sus hogares y que los grupos humanitarios aumenten la asistencia.
El acuerdo exige que Israel y Hamás negocien una segunda fase en la que Hamás liberaría a los rehenes restantes y el alto el fuego continuaría indefinidamente. La guerra podría reanudarse a principios de marzo si no se alcanza un acuerdo.
Israel dice que sigue comprometido con destruir a Hamás, incluso después de que el grupo armado reafirmara su dominio sobre Gaza pocas horas después de la tregua. Un socio clave de extrema derecha en la coalición del primer ministro, Benjamin Netanyahu, ya ha pedido que la guerra se reanude después de la primera fase del alto el fuego.
Hamás dice que no liberará a los rehenes restantes sin un fin de la guerra y una retirada completa israelí de Gaza.
Estados Unidos ha proporcionado un apoyo militar y diplomático crucial a Israel durante la guerra y se considera clave para poner fin al conflicto. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha sido un firme partidario de Israel, pero también se ha comprometido a poner fin a las guerras en Oriente Medio.
El enviado de Trump para Oriente Medio, Steve Witkoff, estuvo en Israel el miércoles y se reunió con Netanyahu, quien viaja a Washington la próxima semana como el primer líder extranjero en reunirse con Trump en su segundo mandato.
Hamás inició la guerra cuando envió a miles de combatientes a irrumpir en Israel el 7 de octubre de 2023. Los milicianos mataron a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a unas 250.
La guerra aérea y terrestre de Israel fue una de las más mortales y destructivas en décadas. Más de 47.000 palestinos han sido asesinados, más de la mitad de ellos mujeres y niños, según el Ministerio de Salud de Gaza, que no especifica cuántos de los muertos eran combatientes.
El Ejército israelí dice que mató a más de 17.000 combatientes, sin proporcionar pruebas, y que hizo grandes esfuerzos para tratar de evitar víctimas civiles. Culpa a Hamás de las muertes de civiles porque sus fuerzas operan en barrios residenciales densamente poblados y colocan infraestructura militar cerca de viviendas, escuelas y mezquitas.
La ofensiva israelí ha transformado barrios enteros en montones de escombros grises, y no está claro cómo o cuándo se reconstruirá algo. Alrededor del 90% de la población de Gaza ha sido desplazada, a menudo varias veces, con cientos de miles de personas viviendo en precarios campamentos de tiendas o escuelas cerradas.
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Krauss informó desde Dubái, Emiratos Árabes Unidos.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
